Los camaroneros conocen la importancia de proporcionar la cantidad adecuada de alimento en el momento adecuado. Pero con los métodos tradicionales, puede resultar difícil controlar la actividad alimentaria y garantizar un crecimiento óptimo.
Pero, ¿cómo saben los criadores de camarón cuando sus diminutas crías tienen hambre? Lo creas o no, los camarones se comunican mediante chasquidos generados por sus mandíbulas durante la alimentación. En la actualidad se cuentan con una serie de métodos para monitorear el comportamiento de alimentación de los camarones.
Los chasquidos, también conocidos como clics de los camarones (pequeños sonidos producidos por sus mandíbulas durante la alimentación) son la clave para revolucionar las prácticas de alimentación de los camarones.
Un equipo de investigadores de la Universidade Federal Rural de Pernambuco (UFRPE) evaluaron los parámetros acústicos del chasquido (clics) durante la actividad alimentaria de Penaeus vannamei desde postlarvas de hasta 12 g en condiciones de laboratorio.
La “ciencia” de los chasquidos de camarones
Todo comenzó con una observación desconcertante: un sonido que emanaba de los estanques de camarones. Los primeros estudios vincularon este sonido con la actividad alimentaria de los camarones, sugiriendo que podría usarse para estimar las poblaciones de camarones. Investigaciones posteriores identificaron el origen de los clics: las mandíbulas, que chocan cuando los camarones comen. Esto allanó el camino para nuevas e interesantes aplicaciones.
Al analizar estos clics (frecuencia, potencia, duración), los científicos pueden utilizar una tecnología llamada monitoreo acústico pasivo (PAM) para desarrollar alimentadores acústicos. Estos comederos «escuchan» los clics y ajustan la alimentación según el tamaño y la actividad alimentaria del camarón. Los resultados son impresionantes: mayor productividad, mejor rendimiento del crecimiento y mayores ganancias para los camaroneros en comparación con los métodos tradicionales.
Comederos acústicos
Los estudios han demostrado que los comederos acústicos pueden mejorar significativamente el manejo del alimento y el crecimiento del camarón en comparación con los métodos tradicionales. Esto se traduce en una mayor productividad y rentabilidad para los productores de camarón.
Si bien los alimentadores acústicos son inmensamente prometedores, existe un desafío. La tecnología actual está optimizada para camarones más grandes (más de 5 gramos). Durante las primeras etapas (30-40 días), cuando los camarones pesan menos de 2 gramos, sus clics son demasiado débiles para que los comederos los detecten de manera eficiente. Esto puede provocar una alimentación insuficiente, lo que obstaculiza el crecimiento en esta fase crucial de desarrollo. Comprender por qué los camarones más pequeños producen clics más débiles es clave para superar este obstáculo.
Escuchar a las postlarvas de camarón
Investigaciones recientes están arrojando luz sobre los factores que influyen en las características del clic. Los estudios demuestran que el alimento extruido produce clics más fuertes en comparación con el alimento granulado. Curiosamente, el tamaño del pellet en sí no afecta el clic, pero los pellets más largos provocan que se emitan más clics durante la alimentación. El tamaño de los camarones también influye: los camarones más grandes generan clics con más energía que sus homólogos más pequeños. Esto refleja observaciones en otros crustáceos, como la langosta, donde los individuos más grandes producen sonidos más fuertes.
El estudio de los investigadores de UFRPE investigó los chasquidos producidos por el camarón blanco del Pacífico (Penaeus vannamei) desde la larva hasta la edad adulta (0,01 a 12 gramos). Los investigadores colocaron camarones en tanques revestidos con espuma que absorbe el sonido y registraron sus clics de alimentación utilizando un micrófono especial submarino. Luego, mediante el uso del software Raven® analizó estos clics, centrándose en propiedades como la frecuencia, la potencia y la duración.
Lo que revelaron los sonidos
Aquí está la parte interesante: el estudio encontró que los camarones comienzan a hacer clic a partir de 0,01 gramos, ¡incluso cuando son larvas diminutas! Estos clics tienen un rango de frecuencia característico (de 15,4 a 70,5 kHz) y al principio son muy silenciosos. A medida que los camarones crecen, los clics se vuelven más fuertes (mayor potencia máxima) y tienen un tono ligeramente más bajo (frecuencia máxima más baja). Curiosamente, los clics no parecen alargarse a medida que los camarones maduran.
El estudio también reveló una conexión fascinante: el tamaño de las mandíbulas de un camarón influye directamente en los clics que produce. ¡Esto significa que al analizar los chasquidos, podemos estimar potencialmente el tamaño y la etapa de desarrollo del camarón!
Optimización de la entrega de los alimentos: el futuro está en los clics
Esta investigación allana el camino para una nueva era en la acuacultura de camarón. Al comprender los chasquidos de los camarones, podemos desarrollar comederos automáticos con base acústica. Estos comederos podrían «escuchar» los clics y ajustar la entrega de alimento en función del tamaño y la actividad alimentaria del camarón, asegurando que reciban la cantidad óptima de alimento durante todo su ciclo de crecimiento.
Conclusión
Si bien este estudio es un gran paso adelante, hay más por explorar. Investigaciones futuras podrían investigar cómo factores como la calidad del agua y el tipo de alimentación afectan las características del chasquido. Además, perfeccionar las técnicas de análisis de clics puede conducir a ajustes del alimentador aún más precisos.
En general, los clics de los camarones ya no son sólo un sonido peculiar. Son una herramienta valiosa para los productores de camarón, ya que tienen el potencial de optimizar las prácticas de alimentación, mejorar la salud del camarón y, en última instancia, aumentar la productividad de la acuicultura.
Contacto
Silvio Peixoto
Departamento de Pesca e Aquicultura, Universidade Federal Rural de Pernambuco (UFRPE), Recife, Brazil
Email: silvio.peixoto@gmail.com
Referencia
Hamilton, S., De Moura, G. J. B., Filho, F. C., Craveiro, C., Castro-Neto, H., Almeida, M., Duarte-Neto, P. J., Soares, R., & Peixoto, S. (2024). Size matters: Variability in the acoustic parameters during feeding activity of Penaeus vannamei in different size classes. Aquaculture, 587, 740843. https://doi.org/10.1016/j.aquaculture.2024.740843
