EEUU.- Los pescados de cultivo son una importante fuente de alimento con significativos beneficios sociales y económicos, pero los pescados que provienen de los sistemas en recirculación pueden tener sabores y olores desagradables. Para limpiar el agua contaminada de los peces de cultivo, bebidas y otros usos, científicos encontraron una fuente improbable, el mucílago del cactus.
Los científicos presentaron su trabajo en el 251st National Meeting & Exposition of the American Chemical Society (ACS).
“Encontramos que hay una atracción entre el mucílago del cactus y el arsénico” dijo Norma Alcantar, PhD. “El mucílago también atrae los sedimentos, bacterias y otros contaminantes. Este capturas estas sustancias y forma una masa grandes o ‘floc’. Los flocs son grandes y pesados, por lo cual precipitan rápidamente después de la interacción con el mucílago”.
Desde hace un siglo se conocía que el mucílago de algunos cactus comunes pueden ayudar a limpiar el agua para bebida. Alcantar conoció el proceso a través de su madre.
Recientemente, Alcantar y Tunan Peng, un asistente de investigación en su laboratorio, fueron contactados por representantes del Mote Marine Laboratory en Sarasota (Florida), quienes les consultaron para que investiguen si el extracto de cactus puede limpiar el agua recirculante del acuario, además de los tanques y estanques de acuicultura.
Alcantar y Peng crearon condiciones que fomentaron el crecimiento bacteriano que desarrollan compuestos desagradables, como el 2-metilisoborneol (MIB) y geosmin. Estos compuestos generan el sabor a barro en el agua y los peces que viven en el sistema de cultivo. Durante la cosecha, la práctica común es purgan a los peces y tanques con agua dulce, lo cual toma varios meses, usa grandes cantidades de agua y estresa a los peces, destacó Alcantar.
En la búsqueda de alternativas, Peng y Alcantar miraron al mucílago de cactus. Ahora, ellos están buscando determinar el mecanismo que permite que el mucílago sea un purificador efectivo.
También, los científicos están estudiando la composición química del mucílago, que está conformado de carbohidratos y algunos 60 azúcares, con el objetivo de sintetizarlo en laboratorio. Además, ellos han desarrollado un prototipo de sistema de recirculación en acuicultura que usa el extracto de cactus como agente limpiador, y ellos realizarán un análisis del ciclo de vida del sistema.