Macapá, Brasil.- Investigadores de Embrapa publicaron un estudio sobre las buenas prácticas para la producción de gamitana (tambaqui, cachama) Colossoma macropomum en jaulas, desde la instalación hasta la cosecha. Si estás planificando incursionar en el cultivo de gamitana, sin duda este manual es para ti debido a que conocerás los conceptos generales del cultivo de gamitana en jaulas.
La creciente demanda por alimento ha estimulado la necesidad de incrementar la producción por unidad de área. En la crianza de peces, la intensificación de la producción se puede realizar en jaulas, una alternativa interesante cuando el agua de buena calidad está disponible.
Los autores del estudio destacan que desde el punto de vista económico, el costo de la implantación de una piscicultura en jaulas es relativamente menor comparado con otros sistema (por ejemplo la construcción de estanques) y puede ser instalado en diferentes cuerpos de agua disponibles, como: reservorios, ríos, lagos permanentes y represas.
Buenas Prácticas Acuícolas
Las Buenas Prácticas de Manejo (BPM) o Buenas Prácticas Acuícolas (BPA) son recomendadas para reducir eventuales impactos ambientales negativos que puedan ser causados por los sistemas de producción de peces, camarones u otros organismos acuáticos. Su finalidad es contribuir a la mejora de la calidad del agua y los índices de desempeño zootécnico, para incrementar la productividad y la rentabilidad.
Criterios para la instalación de jaulas
En la piscicultura de gamitana en jaulas la ubicación de las instalaciones es un factor importante. La elección de la ubicación para instalar las jaulas debe realizarse con mucho criterio. Áreas con conflictos de interés o con otras actividades, como pesca, turismo y navegación, deben ser analizadas rigurosamente o evitadas.
La piscicultura en jaulas exige agua de buena calidad que depende de las características físicas, químicas, y biológicas del ambiente. Los investigadores recomiendan evitar ambientes eutrofizados que provocan gran variación diaria de la calidad de agua.
Otro factor importante es la seguridad y la facilidad de acceso a las jaulas para disminuir los costos y facilitar las actividades de manejo como siembra, biometrías, cosecha y la gestión en general de la producción.
Plan de negocios
Los investigadores también recomiendan que se realice un estudio de viabilidad técnica y económica del cultivo de gamitana en jaulas, considerando los siguientes requisitos:
a) tipo de producto y precio de comercialización;
b) cantidad demandada por el mercado;
c) ciclo de cultivo y escala de producción;
d) proximidad con el mercado consumidor (logística);
e) Inversión y capital de trabajo;
f) mano de obra calificada
Disposición de las jaulas
Las jaulas deben ser distribuidos, preferencialmente, en líneas perpendiculares a la corriente de agua principal. Además de esto, la dirección predominantes de los vientos es muy importante, debido a que su acción da dirección al flujo de agua que pasa por las jaulas, favoreciendo la renovación y el mantenimiento de una concentración adecuada de oxígeno disuelto y la remoción de los metabolitos de los peces y restos de alimentos.
Las corrientes de agua no pueden ser demasiado fuertes, pues pueden causar estrés en los peces y gastos de energía innecesarios para mantener la natación, comprometiendo el crecimiento de los animales. Los vientos fuertes pueden causar ola excesivas, comprometiendo la fijación de los tanques.
Infraestructura de crianza en jaulas
La crianza de peces en jaulas ha demostrado ser una tecnología que puede ser aplicada de diferentes formas en función de diversos ambientes. La estructura de las jaulas puede ser instalada por el productor para la crianza de gamitana en las diferentes fases (alevinaje, pre cría y engorde), de acuerdo con las condiciones de logística de la región y también de las condiciones financieras del productor.
Gestión del cultivo
Según la publicación, el ciclo de crianza de gamitana en el sistema de jaulas dura de 9 a 10 meses, siendo dividido en dos fases: pre-cría y engorde. Generalmente, la pre-cría se realiza por aproximadamente 90 días, hasta que los peces alcanzan un peso de 50 gramos. A partir de ese peso se inicia la fase de engorde, hasta que los peces alcancen la fase comercial (> 1.0 kg).
La publicación también incluye información sobre los cuidados sanitarios que se debe tener durante el cultivo y cosecha. {mprestriction ids=»*»}
Referencia (abierto):
MARCOS TAVARES DIAS; CARLOS ALBERTO DA SILVA; ROSELANY DE OLIVEIRA CORREA; HEITOR MARTINS JUNIOR; ELIANE TIE OBA YOSHIOKA; JAMILE DA COSTA ARAUJO; LAURINDO ANDRE RODRIGUES; FABIOLA HELENA DOS SANTOS FOGACA. 2018. Boas práticas para a produção de tambaqui em tanques-rede: da implantação à despesca. Embrapa Amapá. Comunicado técnico, 152. 30 p. https://www.infoteca.cnptia.embrapa.br/infoteca/handle/doc/1099117 {/mprestriction}
