Caracas, Venezuela.- Las máximas autoridades de las instituciones que regulan el sector pesquero y acuícola en Venezuela evaluaron los avances del Registro Integral de Pesca, Acuicultura y Conexas (RIPAC), una moderna herramienta tecnológica desarrollada por personal del Instituto Socialista de Pesca y Acuicultura (Insopesca) con apoyo de diversas instituciones del Gobierno Bolivariano, como el Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (SAIME), Servicio Nacional Integrado de Administración Aduanera y Tributaria (Seniat), Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (INTTT), el Instituto Nacional de Espacios Acuáticos (INEA), el Centro Nacional de Tecnologías de la Información (CNTI) y la nueva CANTV.
La presentación fue realizada por el Gerente General de Insopesca, Cnel. Raúl Ghersi, acompañado del Gerente de Sistemas de Informática, Ing. Henry Flores; quienes explicaron al presidente de la institución, Ángel Belisario, ministro de Pesca y Acuicultura, los pormenores de este sistema, que busca agilizar la emisión de permisos y otros trámites requeridos por la actividad pesquera, acuícola y conexas en Venezuela.
El ministro Belisario felicitó al equipo que desarrolló este software, llamado a convertirse en el corazón de las funciones que le toca adelantar a Insopesca en materia de tramitación, ordenación, fiscalización y asesoría al sector de la pesca y acuicultura; permitiendo además de celeridad en los procesos, eficiencia en la recaudación, así como transparencia y seguimiento en cada una de las fases que se contemplan para la emisión de registros, trámites, permisos y autorizaciones; requeridas por pescadores artesanales, industriales, ornamentales y deportivos, acuicultores, transportistas, investigadores y cualquier otra actividad centrada en el aprovechamiento o explotación de recursos hidrobiológicos.
El software es bastante amigable y contempla diversas fases para cada uno de los trámites: la primera a cargo de los interesados en obtener el permiso, basada en la carga de los datos y requisitos; la segunda a cargo del personal de inspección y aprobación; la tercera referida a la certificación del proceso; así como la alimentación constante de una base de datos que permitirá acceder al instante a las estadísticas relacionadas a la actividad pesquero-acuícola y conexas; facilitando así la planificación en esta materia; y finalmente, herramientas para el seguimiento y control. Por ahora, inicia su periodo de pruebas, a fin de evaluar todos los aspectos que garanticen su correcta operación antes de su implementación definitiva.