EEUU.- ¿Por qué no estamos cultivando nuestro propio pescado? Esa es la pregunta que trata de responder la película “The Working Waterfront” producida por Living Ocean Productions, que tiene el objetivo de educar a los consumidores sobre el estado actual de la acuicultura en Estados Unidos.
La película da una mirada a cuatro granjas acuícolas que crían bagres en Alabama, salmón el estado de Washington, y ostras y mejillones en Maine. Los productores hablan sobre su compromiso con la responsabilidad ambiental, los beneficios económicos para sus comunidades, y la producción local de productos de alta calidad para sus clientes. Ellos también discuten los desafíos para el crecimiento de la acuicultura en EEUU.
Más del 90% de los alimentos de origen acuático que los estadounidenses comen es importado, y la mitad de esta cantidad procede de la acuicultura. EEUU tiene amplias costas, infraestructura y capacidad para investigar y desarrollar todos los alimentos de origen acuático que el país demanda, de una forma ambientalmente segura. La falta de un proceso consistente y coordinado para obtener permisos, y una percepción anticuada de la acuicultura se citan como obstáculos para incrementar el abastecimiento de pescado y mariscos criados localmente.
“Ha habido muchos avances en la biología y tecnología durante las dos últimas décadas que han hecho que la acuicultura sea mucho más sostenible que cuando se inició hace 40 años” dijo Sebastian Belle, Director Ejecutivo de la Maine Aquaculture Association.
El video fue financiado por la Soy Aquaculture Alliance (SAA) y la United Soybean Board para educar al público sobre los avances hechos por la acuicultura estadounidense. SAA es un miembro fundador de la Coalition for US Seafood Production (CUSP), una asociación informal de productores acuícolas, proveedores, distribuidores de alimentos de origen acuático, minoristas, y restaurantes que apoyan el esfuerzo para hacer crecer la acuicultura doméstica.