Corvallis, EEUU.- Un nuevo estudio sobre la trucha arco iris (Oncorhynchus mykiss) en Oregon ofrece evidencia genética que los peces silvestres y de hatchery son diferentes a nivel de ADN, y que ellos pueden cambiar con sorprendente velocidad.
{mprestriction ids=»*»}La investigación, publicada en Nature Communications, encontró que después de una generación de cultivo en hatchery, la descendencia de los peces silvestres y la primera generación de peces de hatchery difieren en la actividad de más de 700 genes.
Una sola generación de adaptación al hatchery resultó en cambios observables a nivel de ADN que fueron transmitidos a la descendencia, informaron los científicos.
Esta investigación fue realizada por la Oregon State University (OSU) en colaboración con el Oregon Department of Fisheries and Wildlife. Los científicos dijeron que sus hallazgos esencialmente cierran el caso si los peces silvestres y los de cultivo pueden ser genéticamente diferentes.
Las diferencias en la supervivencia y el éxito reproductivo entre los peces de hatchery y silvestres han sido ofrecidos como evidencia de la rápida adaptación al ambiente del hatchery. Esta nueva evidencia de ADN directamente midió la actividad de todos los genes en la descendencia de los peces de hatchery y silvestres. El estudio demuestra que las diferencias genéticas entre los peces de hatchery y silvestre son grandes en términos de escala y totalmente heredables.
No es claro exactamente que características han sido seleccionadas, pero el estudio identifico algunos cambios genéticos que pueden explicar como los peces están respondiendo al nuevo ambiente en el hatchery.
Referencia (abierto):
Mark R. Christie, Melanie L. Marine, Samuel E. Fox, Rod A. French & Michael S. Blouin. 2016. A single generation of domestication heritably alters the expression of hundreds of genes. Nature Communications 7, Article number: 10676 doi:10.1038/ncomms10676.
http://www.nature.com/ncomms/2016/160217/ncomms10676/full/ncomms10676.html {/mprestriction}