La industria de la acuicultura, responsable de una parte importante de nuestro suministro mundial de productos del mar, está en constante evolución. Un área crucial de desarrollo es encontrar ingredientes nuevos y sostenibles para la alimentación de los peces. Si bien los ingredientes tradicionales como la harina de pescado siguen siendo importantes, los investigadores están explorando una variedad de alternativas interesantes.
Un equipo de investigadores liderados por el director técnico de IFFO, Dr. Brett Glencross, y un grupo de nutricionistas acuícolas de renombre mundial de la Texas Agriculture & Medicine University, de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, de la Norwegian University of Life Sciences, del Institute of Aquaculture, University of Stirling y de University of Porto, ante la aparición de una gran variedad de nuevos ingredientes en el sector de los alimentos balanceados para acuicultura, publicaron una revisión científica que ofrece algunas evaluaciones aleccionadoras sobre dónde nos encontramos en la búsqueda de nuevas fuentes de proteínas.
Este artículo se sumerge en el mundo de estos ingredientes alimentarios emergentes, analizando su potencial y limitaciones.
Un espectro de posibilidades
Tradicionalmente, la harina y el aceite de pescado han sido los pilares de los piensos para la acuicultura. Sin embargo, las preocupaciones sobre la sostenibilidad de los recursos y el impacto ambiental de la recolección de estos ingredientes han impulsado la búsqueda de alternativas.
El panorama de nuevos ingredientes es rico y diverso. Desde recursos marinos como las algas hasta opciones innovadoras como la harina de insectos, los investigadores están explorando una variedad de posibilidades. Aquí hay un desglose de algunas categorías clave:
- Ingredientes marinos: Producidos a partir de la pesca forrajera o de subproductos de recursos tanto pesqueros como acuícolas, las algas y organismos unicelulares como las microalgas. Estos ofrecen potencial para proteínas y ácidos grasos esenciales, pero los desafíos incluyen la escalabilidad y la rentabilidad.
- Ingredientes a base de cereales: Los cereales como la soja, el maíz y el trigo se pueden procesar para obtener valiosos componentes alimentarios. Sin embargo, su contenido de proteínas suele ser inferior al de la harina de pescado, lo que requiere una formulación cuidadosa. Asimismo los problemas de digestibilidad y la necesidad de suplementos de aminoácidos esenciales pueden limitar su eficacia.
- Subproductos de animales terrestres: Los restos de la industria procesadora de carne, como la harina de ave, y también harinas de insectos y lombrices, pueden reutilizarse como valiosas fuentes de proteínas para la alimentación de peces. Las consideraciones de sostenibilidad y un procesamiento adecuado son cruciales aquí.
- Ingredientes novedosos: Esta interesante categoría incluye opciones como harina de insectos y organismos unicelulares como levaduras y bacterias. Si bien ofrece un alto contenido de proteínas y una producción eficiente, se están realizando investigaciones sobre sus efectos a largo plazo en la salud de los peces y el medio ambiente.
No hay ingrediente perfecto: la complementariedad es el camino a seguir
“La evaluación demuestra que cada ingrediente tiene puntos fuertes y débiles. En muchos casos, los puntos débiles de un ingrediente pueden compararse con los puntos fuertes de otros para identificar oportunidades de complementariedad”, explica el Dr. Brett Glencross. Por ejemplo, la soja tiene la escala y la estabilidad necesarias para el suministro y la consistencia de la calidad del producto, pero carece de palatabilidad para muchas especies. En cambio, la oferta de harina de pescado es limitada, pero sus características de palatabilidad son excelentes. Ambos funcionan bien entre sí de forma muy complementaria.
Un marco para la evaluación
La elección de los ingredientes adecuados para la alimentación de los peces requiere una consideración cuidadosa. Este artículo presenta un marco de evaluación que ayuda a evaluar cada ingrediente en función de factores clave como:
- Perfil nutricional: ¿Aporta las proteínas, grasas, vitaminas y minerales esenciales que necesitan los peces?
- Disponibilidad y costo: ¿Se puede conseguir de forma constante a un precio asequible?
- Impacto ambiental: ¿Su producción es sustentable y minimiza la huella ambiental?
- Patabilidad: ¿Lo consumirán fácilmente los peces?
Análisis de fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas (FODA)
Para obtener una comprensión más profunda de cada clase de ingrediente, se aplica un análisis FODA. Este enfoque considera:
- Fortalezas: ¿Cuáles son las ventajas inherentes de cada ingrediente?
- Debilidades: ¿Qué limitaciones o inconvenientes poseen?
- Oportunidades: ¿Cómo se pueden desarrollar y utilizar más estos ingredientes?
- Amenazas: ¿Qué riesgos o desafíos potenciales existen en su adopción generalizada?
Al comprender estos factores, podemos tomar decisiones informadas sobre la incorporación de nuevos ingredientes en las formulaciones de alimentos para peces.
¿Qué nos aguarda para el futuro?
La revisión presentó una serie de opciones claras de cara al futuro para mejorar la seguridad de los alimentos balanceados:
- Mejorar la gestión de los recursos existentes para aumentar su productividad.
- Garantizar el aprovechamiento de los recursos.
- Seguir desarrollando la producción de recursos no competitivos.
- Una observación importante de la revisión fue la siguiente:
“Al apreciar mejor los aspectos positivos y negativos de cada ingrediente, es posible aumentar nuestra capacidad de adaptación para responder a las diversas oportunidades de su uso en los alimentos balanceados y mejorar la sostenibilidad del sector de cara al futuro”, concluyó Glencross. En general, aunque los avances técnicos en el trabajo con una gama cada vez más amplia de ingredientes son evidentes, todavía es necesario trabajar en la ampliación de los nuevos recursos para conseguir volúmenes significativos.
Conclusión
Esta revisión enfatiza que ningún ingrediente es un reemplazo perfecto para la harina de pescado. Sin embargo, al comprender las fortalezas y debilidades de cada opción, podemos crear un espectro de ingredientes alimentarios más diverso y adaptable para la acuicultura. Este enfoque no sólo garantiza la sostenibilidad a largo plazo de la industria sino que también contribuye a la producción de productos del mar saludables y nutritivos para los consumidores.
Contacto
Ben Glencross
IFFO – the Marine Ingredients Organisation, London, UK
Email: bglencross@iffo.com
Referencia (acceso abierto)
Glencross, B., Ling, X., Gatlin, D., Kaushik, S., Øverland, M., Newton, R., & Valente, L. M. (2024). A SWOT Analysis of the Use of Marine, Grain, Terrestrial-Animal and Novel Protein Ingredients in Aquaculture Feeds. Reviews in Fisheries Science & Aquaculture, 1-39. https://doi.org/10.1080/23308249.2024.2315049