Chile.- Organización recibió $72.339.000 del Fondo de Escalamiento Productivo para la Pesca Artesanal con el propósito de habilitar un galpón como sala para procesar algas como la Chondracanthus chamissoi (Chicorea de mar), a partir de la cual elaborarán cremas para el cuidado de la piel.
Generar una diversificación productiva eficaz es un reto que ha tomado muy en serio la Comunidad de Caleta Coliumo. Prueba de esto es que al interior de uno de los sindicatos locales, formado por algueras, existe plena conciencia que mediante este camino se puede conseguir una mayor productividad en el sector y, por ende, el acceso a nuevas oportunidades de desarrollo para sus asociadas.
La organización demuestra incluso que los pescadores artesanales pueden ser innovadores, ya que aprovechando las bondades de uno de los principales recursos que recolectan, la «chicorea de mar» (Chondracanthus chamissoi), han iniciado la etapa primaria de un ambicioso proyecto que busca otorgar un valor agregado sustantivo a la actividad extractiva, mediante la elaboración de cremas dérmicas en base al extracto de la propia alga.
Como una manera de fortalecer esta iniciativa, el Fondo de Escalamiento Productivo para la Pesca Artesanal, generado mediante un convenio entre el Fondo de Administración Pesquera (FAP) de la Subsecretaría de Pesca y el Gobierno Regional del Biobío, aprobó un proyecto para habilitar una sala de proceso por un monto de 72 millones 339 mil pesos, el cual contempla también capacitación (comercialización, contabilidad básica, proceso productivo y administración), estudios y asesorías.
Sara Garrido, presidenta del sindicato, indicó que como organización artesanal están plenamente conscientes de la importancia de la nueva política de cultivo y repoblamiento de algas que se está implementando, por lo que han centrado sus esfuerzos en crear nuevas unidades de negocios que permitan generar escalamiento productivo y, por ende, mayores ingresos para las socias.
«Hoy se debe pensar que las algas no solo son materia prima sino que también se pueden crear otro tipo de productos. Elaborar estas cremas es innovador y tiene una gran proyección», explicó Garrido.
La dirigente artesanal señaló también que hoy están esperando el número de registro de salud pública y la denominación de origen para iniciar la segunda etapa planificada de esta novedosa iniciativa.
«Si esto genera el éxito esperado queremos exportarlo, incluso estamos viendo la posibilidad de experimentar con otros tipos de algas, en otras facetas y usos, lo cual nos tiene muy entusiasmadas», precisó la representante de la organización.
Para Raúl Zemelman, químico farmacéutico que asesora al sindicato en el proceso de elaboración de las cremas, este nuevo uso de la chicorea de mar representa una oportunidad importante de generar valor agregado en base a la innovación.
«Estas algas, especialmente las rojas, tienen propiedades que son muy interesantes, ya tienen diferentes compuestos químicos que han demostrado tener eficacia en muchos procesos orgánicos, como la antioxidación, la estimulación o inhibición de enzimas y la absorción de rayos solares, entre muchas otras», destacó el profesional.
Zemelman precisó también que el interés mayor en cuanto al uso de las cremas radica en aprovechar la propiedad de ciertos compuestos químicos del alga de absorber rayos solares ultravioletas, protegiéndose la piel.
«A partir del extracto de la chicorea de mar se puede fabricar un producto natural que absorbe muy bien luz ultravioleta B y A», subrayó.