Colombia (Portafolio).- Estados Unidos depende cada vez más de las importaciones de vegetales frescos y productos pesqueros, mostrando tasas de crecimiento superior al promedio general del 2013, cuando las compras en estos rubros fueron cercanas a los 25.000 millones de dólares.
De ese monto, 18.000 millones correspondieron a productos pesqueros –con alza del 8 por ciento frente al 2012– y 6.600 millones a hortalizas frescas –con un aumento del 15 por ciento–, según datos consolidados del año pasado, por el Departamento de Agricultura de este país.
Las importaciones totales de productos agroforestales y pesqueros ascendieron a 142 mil millones de dólares, que reflejan un alza del 4 por ciento.
Aunque países como China, Canadá, Tailandia, Indonesia, Chile y Vietnam, se mantienen como los grandes dominadores del mercado, el 2013 presento varias novedades como es el caso de la fuerte recuperación de Chile y sus colocaciones de salmón (casi 1.400 millones, con incremento del 34 por ciento), y de India que ha saltado al séptimo lugar de ventas, con un monto superior a los 1.100 millones de dólares, y un crecimiento récord del 67 por ciento.
Dentro del gran peso que tiene el producto congelado, un nuevo segmento tiene cada vez mayor participación y es el referente a los pescados de agua dulce criados en piscinas, que vienen frescos o refrigerados, y en donde países como Honduras, Costa Rica y Colombia están adquiriendo un mayor protagonismo.
En este caso, las compras crecieron el último año en un 33 por ciento, alcanzando cerca de 200 millones de dólares, de los cuales 30 millones correspondieron al producto colombiano con alza del 45 por ciento.
Igualmente empiezan a figurar las ventas de trucha colombiana, por un valor aproximado a los 6 millones de dólares, y un incremento del 3 por ciento.
Sin embargo, se registra un fuerte descenso en las colocaciones de atún enlatado colombiano, del 26 por ciento, para un total de 52 millones de dólares.
En este renglón, Estados Unidos importó el año pasado un total de 1.600 millones de dólares, que reflejan un caída del 8 por ciento. En contraste, Colombia ha reducido sus envíos de mariscos al mercado estadounidense.