Alabama, EEUU.- Las conchas de los camarones pueden usarse para producir fibras que permitirán extraer metales valiosos del agua de mar. Robin Rogers, y su equipo de la University of Alabama, vienen trabajando con la quitina extraído de las conchas de los camarones desde el año 2010.
“Empezamos a trabajar con el Gulf Coast Agricultural and Seafood Co-Op en Bayou La Batre, buscando aprovechar las conchas de los camarones que ellos desechaban, durante la moratoria de la actividad camaronera. Fue bastante claro que se necesitaban nuevos productos” destacó Rogers.
El equipo de Rogers empleó líquidos iónicos para extraer grandes fibras de quitina directamente de las conchas de los camarones. La quitina es insoluble en la mayoría de los solventes, incluído el agua. Ellos convirtieron las moléculas de la superficie de la quitina es una forma más activa denominada quitosano y luego funcionalizado con amidoxima, un grupo funcional con muy alta afinidad para los iones uranilo, y mostraron que la fibra puede recuperar estos iones de una solución acuosa diluida.
Cerca de todo el uranio en el agua de mar tiene un origen natural. “Imagine el potencial ambientalmente positivo de la reducción o eliminación de la necesidad de minar el uranio en tierra, simplemente recuperándolo del océano” destaca Rogers.
Jason Love, un metalúrgico experto de la University of Edinburgh en el Reino Unido, dijo que la recuperación de uranio del agua de mar, el cual se presenta en concentraciones de ppb, podría ser una valiosa alternativa a la minería de este elemento crítico.
“Si bien aun no es comercializable por su naturaleza frágil, el desarrollo de estos materiales es ingenioso y representa un significativo avance en el uso de métodos químicos sustentables para ayudar a resolver un importante desafío global” agregó Love.
Idealmente las fibras pueden ser recicladas y re-usadas en el océano. Otra posibilidad es que puedan ser incineradas para generar energía y obtener los metales dentro de la ceniza, una idea que permitiría el ahorro de dinero y energía mediante la simplificación del proceso de recuperación.
Jaime Lizardi Mendoza, quien usa la quitina en su investigación en el Center for Food Research and Development en México, dijo que el estudio incrementará la disponibilidad de materiales ecológicamente compatibles.
Referencia:
Patrick S. Barber, Steven P. Kelley, Chris S. Griggs, Sergei Wallacea and Robin D. Rogers. Surface modification of ionic liquid-spun chitin fibers for the extraction of uranium from seawater: seeking the strength of chitin and the chemical functionality of chitosan. Green Chem., 2014, Advance Article. DOI: 10.1039/C4GC00092G
http://pubs.rsc.org/en/Content/ArticleLanding/2014/GC/c4gc00092g#!divAbstract