Roma, Italia.- La pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (INDNR) será mucho más difícil a partir de ahora gracias a la inminente entrada en vigor del Acuerdo sobre medidas del Estado rector del puerto (PSMA, por sus siglas un inglés), un innovador tratado internacional promovido por la FAO.
Ahora que se ha alcanzado el umbral necesario, con 30 países miembros que han depositado formalmente sus instrumentos de adhesión, ha comenzado la cuenta atrás para la entrada en vigor del Acuerdo, de forma que el 5 de junio de 2016, el primer tratado internacional en el mundo dirigido específicamente a combatir la pesca INDNR se convertirá en una ley internacional, con carácter vinculante.
En conjunto, los 29 países y la Unión Europea -que ha firmado como parte individual- que se han comprometido formalmente a través de sus instrumentos de adhesión al Acuerdo suponen más del 62 por ciento de las importaciones de pescado en todo el mundo, y el 49 por ciento de las exportaciones, por un total de más de 133 000 y 139 000 millones de dólares EEUU, respectivamente, en 2013.
Cada año, la pesca INDNR suma capturas de hasta 26 millones de toneladas, con un valor que llega a 23 000 millones de dólares EEUU. A la vez, socava los esfuerzos para garantizar la pesca sostenible y la gestión responsable de las poblaciones de peces en todo el mundo.
«Este es el comienzo de una nueva era en la lucha contra la pesca ilegal. Al negar a los pescadores sin escrúpulos un puerto seguro y acceso a los mercados, el PSMA conducirá a toda la industria pesquera hacia una mayor sostenibilidad y tendrá un importante efecto dominó a lo largo de toda la cadena de distribución», aseguró el Director General de la FAO, José Graziano da Silva.
«No dejemos que los operadores de pesca ilegal cuenten ni se dirijan a ningún Estado rector del puerto que no cumpla las normas», añadió, instando a más países a ratificar el acuerdo.
Cómo funciona el tratado
“Las medidas del Estado rector del puerto” –la base de lo que pronto será un tratado activo– hacen referencia a las medidas adoptadas para detectar la pesca INDNR cuando los barcos llegan al puerto.
El nuevo tratado requiere que las partes designen puertos específicos para los buques extranjeros, lo que facilitará los controles. Estos barcos deben solicitar permiso con antelación para entrar en los puertos, y proporcionar información a las autoridades locales -incluyendo la relativa al pescado que llevan a bordo-, y permitir la inspección de su libro de registro, licencias, artes de pesca y la carga real, entre otros aspectos.
Es importante destacar que el Acuerdo insta a los países a denegar la entrada o inspeccionar los buques que se visto implicados en la pesca INDNR, y tomar las medidas necesarias. Para contar con mayor apoyo, incluye también la obligación de que las partes compartan información a nivel regional y mundial respecto a cualquier barco que se descubra está involucrado en la pesca ilegal.
El PSMA se aplica a cualquier uso de un puerto, de manera que incluso los barcos que solo están repostando tendrán que cumplir con los requisitos de inspección.
Impedir que pescadores sin escrúpulos desembarquen su cargamento obtenido de forma ilícita, hace que sea mucho más difícil que este tipo de capturas entre en los mercados nacionales e internacionales. En comparación con la mayoría de los programas de seguimiento, control y vigilancia, las medidas del Estado rector del puerto actúan como elemento disuasorio muy eficaz -y económico- frente a las actividades de pesca INDNR.
Apoyo a la implementación
En algunos casos, los países costeros y los pequeños Estados insulares en desarrollo, -que a menudo albergan algunas de las zonas de pesca más atractivas del mundo- se enfrentan a dificultades para la implementación del Acuerdo. Por ello, la FAO ha realizado inversiones sustanciales en proyectos de construcción de capacidad para apoyar la aplicación de las medidas del Estado del puerto. Ahora que el Acuerdo entra en vigor, la FAO está poniendo en marcha una serie de iniciativas nacionales, regionales e inter-regionales, incluyendo un programa mundial sobre el desarrollo de capacidades para su implementación.
* Los siguientes Estados y organizaciones de integración económica regional forman parte del Acuerdo: Australia, Barbados, Chile, Costa Rica, Cuba, Dominica, Unión Europea -Organización Miembro-, Gabón, Guinea Bissau, Guyana, Islandia, Mauricio, Mozambique, Myanmar, Nueva Zelanda, Noruega, Omán, Palau, República de Corea, Saint Kitts y Nevis, Seychelles, Somalia, Sudáfrica, Sri Lanka, Sudán, Tailandia, Tonga, Estados Unidos de América, Uruguay y Vanuatu.