Chicago, EEUU.- Cuando se oye el término “fuente de proteína alternativa” tofu, tempeh y seitán son lo que normalmente nos viene a la mente. En la edición de marzo de la revista Food Technology, Toni Tarver escribe sobre: microalgas, macroalgas y lenteja de agua como fuentes de proteínas alternativas, igual de nutritivos y agradables al paladar.
{mprestriction ids=»*»} Proteínas derivadas de las algas
Tanto las micro como las macroalgas son ricos en nutrientes con diferentes cantidades de vitaminas A, C, E, ácido fólico, calcio, yodo, hierro, ácidos grasos omega-3, los hidratos de carbono, proteínas y una variedad de otros nutrientes. El contenido de proteínas de las macroalgas varían desde 3 a 50%, mientras que el contenido de proteínas de las microalgas son aún más altos, llegando a 70%.
Súper macroalgas
Entre las macroalgas, las macroalgas rojas tienden a tener el mayor contenido de proteínas, y la especie nori tiene la mayor cantidad: 100 gramos de nori contiene hasta 50 gramos de proteína. El nori tiene un perfil de aminoácidos similar a los guisantes, contiene una alta cantidad de ácidos grasos omega-3 y es una buena fuente de vitamina B12. Nori es comúnmente usado para envolver los rollos de sushi y el nori seco es vendido en hojas que pueden ser cortados en tiras para envolver el arroz y el pescado, o cortado en pequeños trozos para espolvorear sopas.
Lenteja de agua
La lenteja de agua, es la planta de floración más pequeña en el mundo, tiene contenidos de proteína de hasta 45%, que se encuentra en los más altos niveles de proteínas del reino vegetal. Aunque usualmente se percibe como fuente de alimento para aves y peces, las personas en Laos, Tailandia, Vietnam y partes de África consumen las lentejas de agua durante siglos.
Referencia (abierto):
Tarver T. 2016. Palatable proteins for complex palates. Institute of Food Technologists, Vol. 70, No 3.
http://www.ift.org/food-technology/past-issues/2016/march/features/palatable-proteins-for-complex-palates.aspx?page=viewall
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