Roma, Italia.- FAO acaba de publicar un informe que tiene como objetivo el ayudar a los países a mejorar el gobierno de las actividades acuícolas dentro de sus jurisdicciones. Muchos de los conceptos y principios descritos en el informe son comunes a otros sectores, pero no siempre han sido aplicados a la acuicultura debido a que el sector es relativamente nuevo.
La efectividad del gobierno de la acuicultura moderna debe reconciliar el bienestar ecológico y el humano para que la industria sea sostenible en el tiempo. Sin un gobierno efectivo, habrá un mal uso de los recursos, y por ende el estancamiento de la industria y el irreversible daño ambiental.
Existe un consenso de que la acuicultura moderna tiene una orientación comercial, similar a cualquier empresa pequeña o mediana. Para que los recursos sean invertidos debe existir un ambiente económico adecuado y la seguridad de los derechos de propiedad. Sin embargo, también deben haber controles o incentivos para eliminar las malas prácticas en los negocios que dañan la ecología o la sociedad. Esto requiere que la acuicultura no sólo sea rentable, sino también ambientalmente neutral, técnicamente factible y socialmente aceptable.
De acuerdo con el informe son cuatro los principios sugeridos como necesarios para la gobernabilidad efectiva de la acuicultura, estos son: la responsabilidad, la eficacia y la eficiencia de los gobiernos, la equidad y la previsibilidad del Estado de Derecho. Estos principios deben guiar la administración, la legislación el marco regulatorio de la acuicultura.
El sub-comité de acuicultura de COFI solicitó a FAO que prepare una guía para mejorar la gobernancia en la acuicultura. Como parte de este proceso, se prepararon dos informes que proveyeron una visión general de la gobernancia en la acuicultura. El primer informe se concentró en los aspectos legales de la gobernancia de la acuicultura marina; y el segundo informe refleja los problemas que enfrenta la gobernancia en la acuicultura, las mejores prácticas y los desafíos potenciales.
