Sao Paulo, Brasil.- Una investigación realizada en la Universidad de Sao Paulo estudió el comportamiento de los peces para evaluar el riesgo ambiental y detectar contaminante acuáticos. El nuevo enfoque es considerado innovador y desafía, inclusive, a las concentraciones de contaminantes consideradas seguras por las agencias ambientales, que tienen como función controlar y monitorear regularmente los niveles de contaminantes del cuerpo hídrico.
El vertido indiscriminado de sustancias tóxicas en ríos, lagos y mares es una fuente de estrés para los organismos acuáticos. En estas condiciones, los peces naturalmente migran a áreas menos afectadas por los contaminantes. Según el investigador Daniel Clemente, quien defendió su tesis en el Instituto de Biociências de la USP, este fenómeno afecta el equilibrio ecosistémico y puede generar una reducción de la población de peces, causando una posible extinción local de algunos organismos, explicó.
En la investigación realizada en el laboratorio de Ecotoxicologia, de la Escola de Engenharia de Lorena (EEL) de la USP, supervisado por la profesora Teresa Paiva, fueron analizadas varias sustancias tóxicas de interés ambiental: bisfenol, la atrazina, el triclosan y el cobre. Según el biólogo, cada país posee una legislación específica sobre el uso de las sustancias y las concentraciones máximas permitidas en los cuerpos hídricos.
De las sustancias analizadas, muchas han sido prohibidas en el extranjero. En el caso del bisfenol ha sido prohibido en Canadá, Dinamarca, Costa Rica y en algunos Estado de EEUU, pero en Brasil continúa siendo utilizado por empresas en la producción de lentes plásticos, platos y vajilla doméstica, entre otros productos. El bisfenol es considerado un desregulador endócrino. Los peces usados en la investigación fueron el Dario rerio (pez cebra) y Poecilia reticulata (guppy).
La investigación
Para observar la migración de los peces, el biólogo utilizó un sistema formado por varias cámaras de vidrio, donde fueron ubicados los peces junto con diferentes graduaciones de contaminantes, estando algunas concentraciones por debajo de las permitidas por las agencias ambientales. Los peces fueron expuestos a los contaminantes por hasta cuatro horas, luego de los primeros minutos, ellos comenzaron a migrar a las cámaras que tenían menos contaminantes.
Sobre el bisfenol, el estudio detectó que aún estando por debajo de las concentraciones (1 miligramo por litro de agua) consideradas seguras por las agencias ambientales, la sustancia causó un gran impacto en el ambiente y en la población acuática, provocando que los peces migren a áreas con menores concentraciones del compuesto. Los método utilizados por las agencias ambientales no consideran las concentraciones que causan disturbios en el ambiente acuático. Ellas tienen en cuenta apenas concentraciones que causan efectos tóxicos a los organismos acuáticos y a los humanos. De esta forma, Clemente acredita que el método de análisis de fuga de peces expuestos a ambientes contaminados contribuye a un mejor entendimiento de los riesgos ambientales causados por los contaminantes en los cuerpos hídricos, concluyó.
La investigación realizada en la USP se basa en un método desarrollado por los profesores Rui Ribeiro y Matilde Moreira-Santos de la Universidad de Coimbra (Portugal), y adaptado por el investigador Cristiano V. M. Araújo. La tesis “Efeitos de poluentes aquáticos na seleção e habitat e distribuição espacial em peixes: uma abordagem complementar aos testes ecotoxilógicos” fue defendida en diciembre en el Instituto de Biociências (IB).
Daniel Clemente también publicó algunos artículos científicos junto con el investigador Cristiano Araújo.
Referencias:
Cristiano V.M.Araújo, Daniel C.V.R. Silva, Luiz E.T.Gomes, Raphael D. Acayaba, Cassiana C.Montagner, Matilde Moreira-Santos, Rui Ribeiro, Marcelo L.M. Pompêo. Habitat fragmentation caused by contaminants: Atrazine as a chemical barrier isolating fish populations. Chemosphere, Volume 193, February 2018, Pages 24-31. https://doi.org/10.1016/j.chemosphere.2017.11.014
https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0045653517317745