
Los productos acuáticos frescos son una fuente vital de proteínas y nutrientes esenciales en la dieta humana, valorados por su sabor y bajo contenido de colesterol. Sin embargo, a medida que el mercado se expande, la seguridad de los productos acuícolas se ha convertido en una preocupación primordial, centrándose en los residuos químicos.
En este contexto, los anestésicos usados en la acuicultura juegan un papel fundamental. Procedimientos rutinarios como el manejo, muestreo, clasificación y transporte pueden inducir un estrés intenso en los peces, llevando a lesiones, alta mortalidad y una disminución en la calidad del producto. El uso juicioso de anestésicos mitiga estos efectos adversos, reduce las pérdidas económicas y apoya el bienestar animal.
No obstante, su aplicación presenta un desafío significativo: la falta de regulación. En muchas regiones, las dosis y los períodos de retiro (el tiempo necesario para que el químico sea eliminado del organismo antes del consumo) se determinan empíricamente. Esto, sumado a la disparidad de normativas entre países, incrementa el riesgo de que residuos de anestésicos permanezcan en los tejidos comestibles, planteando dudas sobre la salud humana y el impacto ambiental.
Un estudio publicado por investigadores de la Guangdong University of Education, de la South China Agricultural University y del Guangzhou Institute of Food Inspection analiza seis anestésicos comunes en la acuicultura (eugenol, MS-222, benzocaína, 2-fenoxietanol, diazepam y quinaldina), sus riesgos y los métodos analíticos para detectarlos, basándose en una reciente revisión científica.
Conclusiones clave
- Los anestésicos como el eugenol, MS-222 y la benzocaína son cruciales para reducir el estrés, las lesiones y la mortalidad durante el manejo y transporte de peces.
- La falta de regulaciones armonizadas, el uso empírico de dosis y los diferentes períodos de retiro aumentan el riesgo de residuos peligrosos en los productos acuícolas.
- El anestésico MS-222 es el único aprobado por la FDA en EE.UU., pero solo para familias específicas de peces (como salmónidos e ictalúridos) y con un estricto período de retiro de 21 días.
- El uso de sedantes como el diazepam está prohibido en animales de consumo en la UE y China, pero su uso ilegal persiste, presentando un grave riesgo debido a sus residuos altamente persistentes en el pescado.
- Se necesitan métodos de detección rápidos (inmunoensayos y biosensores) y el desarrollo de nuevos anestésicos ecológicos para garantizar la seguridad del consumidor y la sostenibilidad del sector.
Anestésicos bajo la lupa: un análisis detallado
Los anestésicos son agentes químicos que inducen sedación o inmovilidad temporal. Su elección depende de la especie, la operación y la seguridad. A continuación, se detallan los más utilizados y sus perfiles de seguridad.
Eugenol (aceite de clavo)
El eugenol es un compuesto fenólico natural, principal componente del aceite de clavo (85-95%).
- Acción y beneficios: Induce inmovilidad temporal, reduce las lesiones físicas (como la pérdida de escamas) y minimiza el riesgo de infecciones. También disminuye la excreción de amoníaco, mejorando la calidad del agua durante el transporte.
- Residuos y seguridad: Se absorbe por las branquias y se elimina rápidamente. Un estudio en camarón blanco (Litopenaeus vannamei) mostró que los residuos cayeron a niveles seguros en 24.5 horas. La temperatura del agua es clave: un metabolismo más rápido (y menor tiempo de eliminación) se observa a temperaturas más altas (p. ej., 2 horas a 20°C vs. 4 horas a 13°C en lubina).
- Riesgos: En altas concentraciones, puede ser citotóxico, causando anormalidades en embriones de pez cebra.
- Regulación: Varía enormemente. Está aprobado en Nueva Zelanda, Japón (LMR de 50 ng/mL y retiro de 7 días), Australia y Chile. Sin embargo, no está aprobado como anestésico para peces en Estados Unidos ni en China (aunque la FDA de EE.UU. lo permite como aditivo alimentario).
Ms-222 (tricaina)
El MS-222, o tricaina, es uno de los anestésicos más utilizados a nivel mundial por su rápida acción y recuperación.
- Acción: Actúa bloqueando los canales de iones de sodio en las células musculares y nerviosas.
- Residuos y seguridad: Se absorbe por las branquias y la piel y se metaboliza principalmente en el hígado y las branquias. Generalmente no se acumula en los tejidos. Su eficacia se ve afectada por la temperatura del agua, pH y salinidad. Es preferido para especies de agua fría, como salmónidos.
- Riesgos: El consumo humano de pescado con altas concentraciones residuales puede causar irritación cutánea y respiratoria, y en casos raros, daño retinal.
- Regulación: Es el único anestésico aprobado por la FDA de EE.UU. para acuicultura. Sin embargo, su uso está restringido a familias específicas (Ictaluridae, Salmonidae, Esocidae y Percidae) y exige un período de retiro de 21 días. También está aprobado en Noruega (retiro de 21 días) y Nueva Zelanda (10 días). No está aprobado en China ni en la Unión Europea.
Benzocaína
La benzocaína es un compuesto lipofílico de acción rápida y baja toxicidad, lo que la hace una alternativa rentable.
- Acción: Bloquea los canales de sodio, impidiendo la transmisión de impulsos nerviosos.
- Residuos y seguridad: Se metaboliza y excreta principalmente a través de las branquias (59.2% en 3 horas en trucha arcoíris), y en menor medida por los riñones y la bilis.
- Riesgos: Aunque generalmente es segura para los peces, la exposición humana excesiva a través de residuos puede causar arritmias, coma y reacciones alérgicas.
- Regulación: La FDA de EE.UU. tiene una tolerancia de importación de 50 µg/kg. Australia y Nueva Zelanda han establecido un LMR de 0.05 mg/kg. China aún no ha establecido regulaciones específicas para su uso.
Anestésicos prohibidos y de alto riesgo
No todos los agentes sedantes son seguros o legales para su uso en peces destinados al consumo humano.
Mantente siempre informado
Únete a nuestras comunidades para recibir al instante las noticias, informes y análisis más importantes del sector acuícola.
2-fenoxietanol
Aunque es de bajo costo y tiene propiedades bactericidas, el 2-fenoxietanol presenta serias preocupaciones.
- Riesgos: Plantea problemas de residuos, su efecto es prolongado y puede ser dañino para los peces. Los expertos recomiendan evitar su aplicación en especies de acuicultura destinadas al consumo humano.
- Regulación: Su uso en peces para consumo humano está prohibido tanto en Estados Unidos como en la Unión Europea. Su aplicación se restringe a peces ornamentales o de investigación.
Diazepam
El diazepam es un sedante benzodiazepínico de acción prolongada, no un anestésico tradicional. Se ha utilizado ilegalmente para reducir la tasa metabólica de los peces, aliviar el estrés y mejorar las tasas de supervivencia.
- Riesgos: El principal peligro es que sus residuos son persistentes y pueden transferirse a los humanos a través de la cadena alimentaria. Se han detectado concentraciones de hasta 118.6 µg/kg en pescado de agua dulce. Un estudio en Carassius auratus mostró una vida media de 619 horas en músculo y piel, requiriendo al menos 70 días para que la concentración caiga por debajo del límite cuantificable. El consumo humano puede causar fatiga, somnolencia, confusión mental, y en casos graves, coma o efectos carcinogénicos.
- Regulación: Su uso en animales destinados a la alimentación está prohibido en muchos países, incluyendo China (Anuncio No. 193) y la Unión Europea (Reglamento (CE) No 470/2009).
Quinaldina
Es un anestésico alcaloide utilizado desde la década de 1950.
- Riesgos: La investigación sobre su farmacocinética (cómo se mueve en el cuerpo) y toxicología es muy limitada. Además, las aguas residuales que contienen quinaldina son resistentes a la degradación, lo que plantea riesgos ecológicos.
- Regulación: Actualmente, ninguna autoridad nacional o internacional autoriza explícitamente el uso de quinaldina en peces para consumo humano.
¿Cómo se detectan los residuos de anestésicos?
El monitoreo de residuos es esencial, pero complejo. Los componentes del pescado (proteínas, grasas) pueden interferir, y los residuos suelen estar en concentraciones muy bajas.
Métodos instrumentales (laboratorio)
Estos métodos son altamente precisos y sensibles, aunque requieren tiempo y personal especializado.
- Cromatografía de Gases (GC y GC-MS): Son los métodos preferidos por su alta sensibilidad. Son especialmente efectivos para anestésicos volátiles o semivolátiles, como el eugenol y el MS-222.
- Cromatografía Líquida (LC y HPLC): A diferencia del GC, no requieren que el compuesto se volatilice. Son más adecuados para anestésicos no volátiles o térmicamente inestables, como el 2-fenoxietanol y la benzocaína.
Métodos de detección rápida (en campo)
Para el análisis rápido de grandes cantidades de muestras in situ, se están desarrollando alternativas a los instrumentos de laboratorio.
- Inmunoensayos (ELISA, GICA): Se basan en la reacción específica entre antígenos y anticuerpos. Métodos como el ELISA o las tiras de inmunocromatografía de oro coloidal (GICA) permiten una detección rápida y sensible, a veces visible a simple vista.
- Sensores electroquímicos: Convierten las propiedades químicas del anestésico en una señal eléctrica. Ofrecen alta sensibilidad, facilidad de operación y potencial de miniaturización para uso en campo.
Conclusiones y el futuro de la anestesia en acuicultura
Los anestésicos como el eugenol, MS-222 y benzocaína son herramientas esenciales para mejorar el bienestar animal y reducir las pérdidas en la acuicultura. Sin embargo, la falta de regulaciones globales armonizadas y la preocupación por la acumulación de residuos en tejidos comestibles siguen siendo desafíos críticos.
La situación se complica por el uso ilegal de sedantes prohibidos como el diazepam, que debido a su alta persistencia, representa un riesgo directo para la seguridad alimentaria.
Para avanzar, el sector necesita priorizar la investigación en varias áreas clave:
- El desarrollo de nuevos anestésicos ecológicos, de baja toxicidad y rápida biodegradación, para reducir la acumulación de residuos.
- Avances en tecnologías de detección multirresiduo, como biosensores más sensibles y pruebas en el punto de atención (point-of-care), que permitan un monitoreo más rápido y eficiente.
- La adopción de un enfoque «Una Salud» (One Health), que integre la salud humana, animal y ambiental, para crear marcos regulatorios armonizados globalmente.
Referencia (acceso abierto)
Jia, B.-Z., Rui, X.-Y., Wang, Y., Zeng, X., Sheng, S.-J., Zeng, B.-J., Xu, Z.-L., & Luo, L. (2025). Fishery Anesthetics in Aquaculture Products: Safety Concerns and Analytical Methods. Foods, 14(22), 3928. https://doi.org/10.3390/foods14223928
Editor de la revista digital AquaHoy. Biólogo Acuicultor titulado por la Universidad Nacional del Santa (UNS) y Máster en Gestión de la Ciencia y la Innovación por la Universidad Politécnica de Valencia, con diplomados en Innovación Empresarial y Gestión de la Innovación. Posee amplia experiencia en el sector acuícola y pesquero, habiendo liderado la Unidad de Innovación en Pesca del Programa Nacional de Innovación en Pesca y Acuicultura (PNIPA). Ha sido consultor senior en vigilancia tecnológica, formulador y asesor de proyectos de innovación, y docente en la UNS. Es miembro del Colegio de Biólogos del Perú y ha sido reconocido por la World Aquaculture Society (WAS) en 2016 por su aporte a la acuicultura.




