
El cultivo de langostino blanco (Penaeus vannamei) es un motor económico fundamental en la costa norte del Perú, pero su sostenibilidad depende de un manejo sanitario eficaz y responsable. Los antimicrobianos, como los antibióticos, son herramientas esenciales para controlar enfermedades bacterianas y asegurar el bienestar animal. Sin embargo, su uso inadecuado representa una seria amenaza tanto para la productividad de las granjas como para la salud pública global.
Frente a este desafío, El Ministerio de la Producción (Produce), mediante la Autoridad Nacional de Sanidad e Inocuidad en Pesca y Acuicultura (Sanipes), y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), con el apoyo del Gobierno de la República de Corea, han desarrollado una guía de buenas prácticas que establece un camino claro para los productores. Este artículo resume las recomendaciones clave de dicho documento, enfocándose en cómo utilizar estos fármacos de manera prudente para proteger la sanidad, la inocuidad y el futuro del sector langostinero.
Conclusiones clave
- 1 Conclusiones clave
- 2 ¿Por qué es tan importante el uso prudente de los antimicrobianos?
- 3 La prevención es la primera línea de defensa
- 4 Conocer al enemigo: no todas las enfermedades se tratan con antibióticos
- 5 Buenas prácticas en la administración y manejo de antimicrobianos
- 6 Alternativas sostenibles: el futuro del manejo sanitario
- 7 Entradas relacionadas:
- El uso de antimicrobianos debe ser siempre la última opción, priorizando la prevención a través de una sólida planificación sanitaria y bioseguridad.
- Es obligatorio que todo tratamiento con antimicrobianos sea prescrito por un médico veterinario habilitado, basándose en un diagnóstico preciso.
- El uso inadecuado, tanto por subdosis como por sobredosis, genera resistencia antimicrobiana (RAM), toxicidad en los animales y residuos peligrosos en el producto final.
- Los antibióticos son ineficaces contra las enfermedades virales, que son la mayoría en langostinos. Su uso se limita a infecciones bacterianas confirmadas como AHPND o NHPB.
- Existen alternativas sostenibles como probióticos, prebióticos y fitobióticos que mejoran la salud del cultivo y reducen la dependencia de los antimicrobianos.
¿Por qué es tan importante el uso prudente de los antimicrobianos?
El uso incorrecto de antimicrobianos tiene consecuencias que van más allá de un tratamiento fallido. El mayor peligro es el desarrollo de la Resistencia a los Antimicrobianos (RAM), un fenómeno que ocurre cuando bacterias, virus u otros microorganismos evolucionan y dejan de responder a los medicamentos. Esto no solo complica el tratamiento de enfermedades en los animales, sino que también amenaza la eficacia de los antibióticos en la medicina humana, en línea con el enfoque «Una Sola Salud«.
Desde una perspectiva económica, un manejo inadecuado puede llevar a:
- Pérdidas productivas: Tratamientos ineficaces que resultan en mortalidades y pérdida de lotes.
- Costos adicionales: Necesidad de usar fármacos más caros o repetir tratamientos.
- Rechazos comerciales: La presencia de residuos de medicamentos por encima de los límites permitidos puede cerrar las puertas de mercados internacionales.
La prevención es la primera línea de defensa
La guía enfatiza que el mejor tratamiento es el que no se necesita. Una planificación sanitaria robusta es la base para minimizar la incidencia de enfermedades y, por tanto, la dependencia de los antimicrobianos. Los componentes clave de un buen plan sanitario incluyen:
- Diagnóstico y monitoreo: Vigilar constantemente la salud de los animales a través de la observación de su comportamiento (Nivel I), análisis microbiológicos (Nivel II) y moleculares (Nivel III).
- Bioseguridad estricta: Implementar medidas como el control del agua y del personal, la desinfección de equipos y el uso de cercos perimétricos para evitar la entrada y diseminación de patógenos.
- Capacitación del personal: Formar al equipo en buenas prácticas de higiene y reconocimiento temprano de signos clínicos.
- Control de piensos y agua: Utilizar alimentos con registro sanitario y monitorear permanentemente los parámetros de calidad del agua.
Conocer al enemigo: no todas las enfermedades se tratan con antibióticos
Un error común es utilizar antibióticos para tratar cualquier signo de enfermedad. La guía es clara al respecto: los antibióticos solo son efectivos contra bacterias, no contra virus. De las diez enfermedades de mayor importancia para el langostino en Perú, siete son virales y una es parasitaria.
El uso de antimicrobianos debe limitarse estrictamente a infecciones bacterianas diagnosticadas, como la Hepatopancreatitis Necrotizante (NHPB) o la Enfermedad de la Necrosis Hepatopancreática Aguda (AHPND). Aplicarlos contra virus como el Síndrome de la Mancha Blanca (WSSV) no solo es inútil, sino que acelera la aparición de resistencias en bacterias del entorno.
Buenas prácticas en la administración y manejo de antimicrobianos
Cuando un tratamiento antimicrobiano es inevitable, debe realizarse siguiendo pautas estrictas para garantizar su eficacia y seguridad.
La prescripción veterinaria: una regla no negociable
El uso de cualquier medicamento veterinario, ya sea directamente o para la fabricación de pienso medicado, debe ser ordenado por un médico veterinario habilitado a través de una prescripción médica. Esta decisión debe basarse en un diagnóstico clínico y etiológico preciso, considerando el espectro del fármaco y la sensibilidad del patógeno.
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Preparación y administración del pienso medicado
La vía más común para administrar antibióticos en langostinos es oral, a través del alimento. Para la preparación en granja (extra-pellet), se debe:
- Pesar la dosis exacta indicada por el veterinario.
- Mezclar el fármaco con un ligante (como aceite de pescado o lecitina) para asegurar que se adhiera uniformemente a los pellets.
- Distribuir el alimento preferiblemente en horas de menor temperatura y retirar el sobrante después de dos horas para no afectar la calidad del agua.
- Es crucial preparar solo la cantidad diaria necesaria para evitar que el producto pierda estabilidad y eficacia.
El peligro de una dosis incorrecta
Tanto la subdosificación como la sobredosificación son peligrosas. Una dosis insuficiente no elimina la infección, permitiendo que las bacterias más fuertes sobrevivan y desarrollen resistencia. Por otro lado, una sobredosis puede ser tóxica para los langostinos, causando daños en órganos vitales como el hepatopáncreas, y deja residuos elevados en el producto final, con riesgo para la salud humana.
Almacenamiento y el período de retiro
Los medicamentos veterinarios y piensos medicados deben almacenarse en un lugar seguro, limpio, ventilado y protegido de la luz solar y la humedad, siempre en su envase original.
Finalmente, es fundamental respetar el período de retiro: el tiempo mínimo que debe pasar entre la última administración del medicamento y la cosecha. Esto garantiza que los residuos del fármaco en el producto final estén por debajo de los límites seguros para el consumo humano. Los estanques bajo tratamiento deben estar claramente identificados para evitar cosechas accidentales antes de tiempo.
Alternativas sostenibles: el futuro del manejo sanitario
La tendencia global es reducir la dependencia de los antimicrobianos. Afortunadamente, existen alternativas no terapéuticas que fortalecen la salud de los langostinos y mejoran el ambiente de cultivo:
- Probióticos: Bacterias beneficiosas que mejoran la salud intestinal y la resistencia a enfermedades.
- Prebióticos: Ingredientes no digeribles que estimulan el crecimiento de bacterias benéficas en el intestino.
- Fitobióticos: Extractos de plantas con propiedades antimicrobianas y antioxidantes.
- Inmunoestimulantes: Compuestos como los beta-glucanos que potencian la respuesta inmune de los langostinos.
La adopción de estas alternativas, junto a una bioseguridad rigurosa, es clave para una producción langostinera más sostenible y resiliente en el Perú.
Referencia (acceso libre)
Organismo Nacional de Sanidad Pesquera (SANIPES) & Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). (2025). Guía informativa: Buenas prácticas en el uso de antimicrobianos para la crianza de langostinos (Penaeus vannamei) en el Perú. SANIPES; FAO. 27 p.

Editor de la revista digital AquaHoy. Biólogo Acuicultor titulado por la Universidad Nacional del Santa (UNS) y Máster en Gestión de la Ciencia y la Innovación por la Universidad Politécnica de Valencia, con diplomados en Innovación Empresarial y Gestión de la Innovación. Posee amplia experiencia en el sector acuícola y pesquero, habiendo liderado la Unidad de Innovación en Pesca del Programa Nacional de Innovación en Pesca y Acuicultura (PNIPA). Ha sido consultor senior en vigilancia tecnológica, formulador y asesor de proyectos de innovación, y docente en la UNS. Es miembro del Colegio de Biólogos del Perú y ha sido reconocido por la World Aquaculture Society (WAS) en 2016 por su aporte a la acuicultura.