por CORDIS
Los talleres y las encuestas son solo dos de las herramientas que el proyecto AquaVitae está empleando para impulsar la producción de oreja de mar, algas y ostras en el océano Atlántico.
Una población mundial en crecimiento y la necesidad de una mejor seguridad alimentaria están sometiendo a nuestros océanos a una presión cada vez mayor. La acuicultura, un medio de producción de alimentos procedentes del océano que utiliza eficientemente los recursos, está contribuyendo a aliviar esa presión. Sin embargo, debe ser más sostenible y crecer más allá de la piscicultura para incluir especies de nivel trófico bajo.
Las especies marinas de nivel trófico bajo, pertenecientes a los niveles más bajos de la cadena alimentaria (macroalgas, ostras, mejillones, erizos de mar, pepinos de mar y orejas de mar) tienen un menor impacto medioambiental, puesto que pueden cultivarse de formas que no generan residuos. El proyecto AquaVitae, financiado con fondos europeos, trabaja ahora en el aumento de la producción de especies de nivel trófico bajo sostenibles en el océano Atlántico. El proyecto está representado por treinta y cinco socios de Europa, Norteamérica, Sudamérica y África.
Creación de una comunidad de acuicultura sostenible
Como parte de su objetivo de creación de una comunidad en todo el Atlántico, AquaVitae asistió recientemente al Día Marítimo Europeo (EMD, por sus siglas en inglés) 2022, celebrado en Rávena, Italia. Demostró el fomento de la acuicultura sostenible mediante el apoyo a la investigación y la colaboración entre países. El EMD es un evento de dos días que se celebra anualmente y que reúne a la comunidad marítima europea para debatir asuntos y acciones conjuntas que fomenten una economía azul sostenible.
De las setenta solicitudes enviadas para presentar un taller en el EMD, solo veinticuatro fueron aceptadas, siendo AquaVitae una de ellas. El taller de AquaVitae, celebrado el 20 de mayo, se centró en cómo unir fuerzas con nuevos sistemas alimentarios basados en la acuicultura. Cincuenta participantes asistieron al taller, que tuvo formato de mesa redonda y fue presentado por el Dr. Philip James, de Nofima (Noruega), coordinadora del proyecto AquaVitae.
El Dr. James dirigió un debate entre cinco investigadores del proyecto provenientes de las Islas Faroe, Francia, Sudáfrica y España. Según un artículo publicado en el sitio web del proyecto AquaVitae, los cuatro países están trabajando con las mismas técnicas y con las mismas especies de nivel trófico bajo, que son algas y orejas de mar.
Habida cuenta de que uno de los objetivos del proyecto es aplicar procesos de acuicultura nuevos o mejorados, los ponentes debatieron las ventajas de una acuicultura multitrófica integrada (AMTI). En un sistema de AMTI, los productos residuales de una especie se utilizan como alimento para otra.
Los datos obtenidos durante el talles pueden ayudar a los socios del proyecto a aplicar o mejorar sus propios sistemas. El Dr. Sylvain Huchette, del socio del proyecto France Haliotis (Francia), destacó: «Nos inspiramos en Sudáfrica para crear tanques de producción de macroalgas en tierra. Ha sido todo un reto replicar las técnicas en Europa».
Solicitud de información de investigación sobre la ostra
Los socios de AquaVitae también están «trabajando en el desarrollo de protocolos para la recogida de semillas marinas y discutiendo la producción en estanques de semillas de ostra», tal y como informó el sitio web de Native Oyster Restoration Alliance. Para obtener información sobre la importancia de este trabajo para las partes interesadas europeas que participan o se benefician de la producción de semillas de ostra, el proyecto ha creado una breve encuesta en línea. Los resultados se comunicarán a través de entregables y presentaciones de AquaVitae (New species, processes and products contributing to increased production and improved sustainability in emerging low trophic, and existing low and high trophic aquaculture value chains in the Atlantic).
Para más información, consulte:
sitio web del proyecto AquaVitae