Chile – Científicos identifican el origen de grupos de patógenos que afectan el cultivo de congrio rojo.
La industria acuícola mundial tiene a la diversificación, principalmente a través del cultivo de especies nativas. El congrio rojo (Genypterus chilensis) es un pez batidemersal que habita en los fondos rocosos de las aguas profundas en el océano Pacífico suroriental, desde el sur de Perú hasta el sur de Chile.
La carne del congrio rojo tiene una alta demanda gastronómica y solo se explota estacionalmente. Una fuerte disminución en los rendimientos pesqueros en los últimos 12 años ha llevado a un aumento de los precios y una demanda insatisfecha estimada de 3048 toneladas por año.
El Programa de Diversificación de la Acuicultura de Chile ha alentado los desarrollos tecnológicos para la cría de especies nativas como el congrio rojo (Genypterus chilensis), pero las prácticas intensivas de acuicultura han provocado infecciones bacterianas como las descritas por Vibrio toranzoniae, Vibrio tapetis y Tenacibaculum dicentrarchi en distintos estados de cultivos (larvas, juveniles y reproductores).
Precisamente, con el fin de conocer la causa de estas infecciones reportadas en estudios previos, investigadores de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, de la Indiana University Northwest (EEUU), de la University of Wisconsin-Milwaukee (EEUU), de la Universidad Andrés Bello y del Interdisciplinary Center for Aquaculture Research (INCAR) realizaron un estudio retrospectivo que permitiera analizar las comunidades bacterianas naturales asociadas con la recirculación del agua de mar utilizada en una instalación experimental de acuicultura de congrio colorado.
Las muestras de agua se analizaron mediante métodos de cultivo tradicionales y secuenciación de amplicones de alto rendimiento independiente del cultivo usando el gen 16S rRNA.
“Los resultados de la secuenciación mostraron una mayor abundancia relativa de Vibrio y Tenacibaculum spp. y precisamente alrededor del momento de los brotes infecciosos, pero los géneros más abundantes de aislamientos cultivados no conincidieron necesariamente con los observados a través de la secuenciación” reportaron.
Los investigadores también indicaron que los aislamientos cultivados pertenecieron a Vibrio (21,6%), Pseudolteromonas (15.7%), Aliivibrio (13.7%) y Shewanella (7.8%), los cuales se analizaron para determinar los factores de virulencia y la susceptibilidad a los antibióticos y así determinar los posibles riesgos y tratamientos en caso de que ocurran brotes futuros. Solamente unos pocos aislados presentados propiedades enzimáticas asociadas a virulencia. Por el contrario, la secuenciación de alto rendimiento estableció como los géneros dominantes a Paraperlucidibaca, Colwellia, Polaribacter, Saprospiraceae y Tenacibaculum, con Vibrio en el vigésimo séptimo lugar en abundancia. Aunque las bacterias predominantes identificadas por los dos enfoques diferían, se obtuvo información valiosa de cada método.
“Esta investigación es parte de los estudios realizados durante la primera etapa del FONDAP INCAR, en que nos volcamos a generar conocimiento sobre los riesgos sanitarios que podrían enfrentar el congrio colorado, una especie de gran importancia para la diversificación de la acuicultura chilena. En este sentido, nuestros resultados apoyan la alta susceptibilidad que presenta este pez ante bacterias de los géneros Tenacibaculum y Vibrio, siendo imprescindible el monitoreo de la presencia y abundancia de estos patógenos potenciales, lo cual podría ser útil para proporcionar medidas profilácticas que permitan prevenir los brotes en las distintas etapas de cultivo del congrio colorado” indicó el investigador principal del INCAR y de la Universidad Andrés Bello Dr. Ruben Avendaño-Herrera.
Referencia (acceso abierto):
Levican, Arturo; Fisher, Jenny C.; McLellan, Sandra L.; Avendaño-Herrera, Ruben. 2020. «Microbial Communities Associated with Farmed Genypterus chilensis: Detection in Water Prior to Bacterial Outbreaks Using Culturing and High-Throughput Sequencing.» Animals 10, no. 6: 1055. https://doi.org/10.3390/ani10061055
Fuente: INCAR