Vigo, España.- Científicos determinaron el efecto de la densidad de mejillones sobre el crecimiento en el cultivo suspendido, usando técnicas de cultivo comercial comúnmente empleados en Galicia.
Las condiciones de apiñamiento en las poblaciones de bivalvos causan procesos de competencia intraespecíficas, dando como resultado una reducción del crecimiento individual. En la acuicultura, la densidad es usualmente maximizada para obtener una mayor producción comercial.
El comportamiento gregario que caracteriza a los bivalvos está asociado con ciertas ventajas como la protección de los predadores, el éxito reproductivo y la optimización de los regímenes hidrodinámicos conducen a mayor flujo del seston. Sin embargo, las altas densidades poblacionales pueden conducir a limitaciones en el alimento y espacio, induciendo el fenómeno de competencia intraespecífica.
Los científicos del Instituto de Investigaciones Marinas “Eduardo Cabello” de CSIC, midieron indicadores de crecimiento como longitud y peso de la concha, tasas de crecimiento, curvas de crecimiento y distribuciones de las frecuencias de tamaños en siete densidades distintas (220, 370, 500, 570, 700, 800 y 1150 ind/m) durante la segunda fase de cultivo.
De acuerdo con los resultados de los científicos se observó un efecto negativo de la densidad sobre el crecimiento individual. Los individuos cultivados a las menores densidades presentaron las tasas de crecimiento más altas y como consecuencia alcanzaron mayores valores en peso y longitud al final del experimento, que los cultivados a las densidades más altas.
Según los científicos las diferencias en el crecimiento relacionados a la densidad de cultivo podría sugerir diferencias en la competencia intraespecífica por recursos limitados (espacio/alimento).