Vietnam – Los sedimentos de la piscicultura del bagre rayado pueden ser usados como fertilizantes en el cultivo de pepino, permitiendo una reducción de 25 a 50% en el uso de fertilizantes químicos y un incremento en la producción.
Mientras que el desarrollo de la acuicultura industrial genera grandes ganancias e ingresos, también representa riesgo por los impactos ambientales negativos. Estos impactos incluyen la modificación del paisaje y la pérdida de la biodiversidad, y la eutrofización causada por la descarga de sedimentos ricos en nutrientes en los cuerpos de agua locales.
Los sedimentos y lodos de los estanques de acuicultura intensiva están enriquecidos con materia orgánica, nitrógeno, fósforo y macro y micronutrientes que se han acumulado en los sedimentos de los estanques.
Una parte importante de la materia orgánica inorgánica y orgánica disuelta y suspendida dentro de los efluentes de los estanques acuícolas proviene de los piensos, ya sea en forma de productos finales de la digestión y metabolismo, o de los piensos no consumidos, o indirectamente a través de la eutrofización en los estanques.
Los efluentes y sedimentos de los estanques de cultivo de bagres en el Delta del Mekong son removidos y dispuestos aproximadamente cada dos meses durante el ciclo de cultivo de los peces. Debido a que los sedimentos y lodos de los estanques están enriquecidos con materia orgánica y nutrientes, tienen el potencial de convertirse en fertilizante y acondicionador del suelo.
Existen muchos ejemplos de investigaciones de que la integración de los sistemas acuícolas-agrícolas son económica y ambientalmente sostenibles. Sin embargo, estudios previos en Vietnam, Tailandia, Bangladesh y China se han concentrado en el reuso de los efluentes de los estanques de cultivo del bagre rayado en el cultivo de arroz, vegetales, entre otros.
Muchas investigaciones sugieren el reciclaje de los sedimentos de los estanques de crianza de peces como una solución potencial que podría reducir la dependencia en los fertilizantes sintéticos.
Con un caso de estudio en el Delta del Mekong, los investigadores del Ton Duc Thang University, de la Loc Troi Groups of Vietnam y de la Stockholm University (Suecia), determinaron mezclas adecuadas de sedimento de estanques de cultivo de bagre rayado (Pangasianodon hypophthalmus) y el uso de paja de arroz, o jacinto de agua, para fertilizar plantas de pepino (Cucumis sativus L.) en un sistema integrado de pepino-gourami gigante (Osphronemus goramy).
La finalidad de los investigadores es evaluar cómo los fertilizantes químicos y los residuos orgánicos pueden ser combinados para reducir las dependencia en la adición de químicos, a la vez que se incrementan las producciones de los vegetales.
“Se encontraron concentraciones de nutrientes más altas al mezclar 30% de sedimento de estanques con 70% de paja de arroz o jacinto de agua” reportan.
Los científicos destacan que cuando la mezcla se usa en combinación con fertilizantes químicos, se encontró que se puede lograr una reducción del 25 al 75% en la aplicación de fertilizantes químicos, a la vez que se incrementan los rendimientos de los pepinos.
“La mayor producción de frutos y de número de frutos se encontró cuando se aplicó 50% de dosis máxima de fertilizantes inorgánicos y orgánicos para los cultivos durante las estaciones de estiaje y lluvias, mientras que los valores más bajos fueron obtenidos cuando los pepinos se cultivaron sólo con fertilizantes orgánicos” destacan.
De acuerdo a los investigadores, la integración indirecta de la acuicultura con la agricultura a través del reuso de los sedimentos de los estanques de crianza de peces como fertilizantes orgánicos para los cultivos vegetales tiene un potencial significativo para contribuir a la intensificación sostenibles y los objetivos de seguridad nutritiva, reduciendo de esta forma los impactos ambientales locales asociados con la disposición de los sedimentos, e incrementando la producción agrícola.
“Hemos demostrado que el uso de fertilizantes orgánicos pueden reemplazar o suplementar a los químicos, y tienen un efecto positivo sobre las producciones. Esto también puede ser alcanzado en la combinación con la producción de peces” concluyen los investigadores.
Ellos también destacan que su estudio demuestra que los nutrientes en los fertilizantes orgánicas de los sedimentos de los estanques de cultivo del bagre rayado con paja de arroz o jacinto de agua puede reemplazar el 25 a 50%, o hasta el 75% de los fertilizantes orgánicos como una fuente de nutrientes de las plantas de pepino.
El estudio contó con financiamiento parcial de la Swedish Research Council (Vetenskapsrådet), Formas, y Sida a través de la convocatoria “Sustainability and resilience—Tackling climate and environmental changes” (VR 2016–06313).
Referencia (acceso abierto):
Thi Da, Chau; Anh Tu, Phan; Livsey, John; Tang, Van T.; Berg, Håkan; Manzoni, Stefano. 2020. «Improving Productivity in Integrated Fish-Vegetable Farming Systems with Recycled Fish Pond Sediments.» Agronomy 10, no. 7: 1025.