La industria de la acuicultura enfrenta una serie de desafíos. Al mismo tiempo, la sustentabilidad del sector acuícola depende de un ambiente limpio y saludable.
Asimismo, el cambio climático también posee una serie de amenazas para las granjas acuícolas, debido al incremento en el riesgo de inundaciones, erosión costera, tormentas, entre otros.
En este sentido, es necesario que todos los países cuenten con un marco legal efectivo para ayudar a que la industria de la acuicultura enfrente todos los desafíos y se enrumbe en el camino de la sostenibilidad.
La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) publicó un estudio en donde identificaron los elementos esenciales de un marco legal para promover la acuicultura sostenible.
El estudio incluye cinco capítulos en donde se describen los marcos normativos a nivel internacional que son de mayor relevancia para la acuicultura. Estos incluyen marcos creados sobre la base del derecho internacional, instrumentos y directrices de derecho indicativo y esquemas privados de certificación de la acuicultura.
Asimismo, otros capítulos contienen una evaluación de los marcos legales nacionales para la acuicultura y el papel y la evolución de la legislación acuícola dentro de esos marcos.
La importancia de un marco legal adecuado
Según describe la guía en muchos países el crecimiento de la acuicultura parece haber superado el desarrollo de la legislación y los marcos legales para regir la actividad acuícola.
De esta forma, en muchos países, al no tener una legislación específicamente diseñada para la acuicultura, han luchado por controlar el acceso y las operaciones acuícolas a través de una legislación anticuada y marginalmente relevante, como leyes de pesca antiguas.
“En estas circunstancias, la falta de un entorno normativo propicio para la acuicultura puede ser una limitación importante para el crecimiento del sector tanto en los países desarrollados como en los países en desarrollo”, destacan los autores.
En este sentido, reportan que surge el desafío para los responsables de la formulación de políticas debido a la gran diversidad del sector acuícola en términos de:
- El número de especies y grupos de especies que vienen siendo cultivados: 622 “especies” (incluidos híbridos) registrado en el año 2018.
- Los diferentes ambientes acuáticos donde se realiza acuicultura: agua dulce, agua salobre y agua marina.
- La diversidad en términos de lugares donde se cultivan especies acuícolas: campos de arroz, diques, tanques, raceways, estanques, sistemas de recirculación, etc.
- La escala comercial y física de las operaciones acuícolas, que pueden variar de un solo estanque en la acuicultura familiar a grandes estanques comerciales para la crianza de camarones, así como la producción intensiva.
Herramienta de revisión y evaluación legal de la acuicultura (ALART)
El estudio pretende actuar como una guía sobre la complejidad de los marcos legales para la acuicultura y también para servir como documento de antecedentes o de recursos para la “Aquaculture Legal Assessment and Revision Tool” (ALART) o Herramienta de revisión y evaluación legal de la acuicultura.
Según la guía el ALART ha sido desarrollado como una herramienta analítica detallada para evaluar sistemáticamente los marcos legales nacionales para la acuicultura con el fin de identificar posibles brechas, debilidades y problemas para una posible reforma con un enfoque particular en la protección ambiental y la salud animal y vegetal.
Los autores del estudio esperan que ALART se vuelva de uso universal.
Elementos claves de un marco legal para la acuicultura sostenible
En este capítulo el documento identifica y describe los elementos clave de un marco legal apropiado para el desarrollo de la acuicultura responsable, uno que promueva una industria acuícola ambiental, social y comercialmente sostenible.
De acuerdo con el orden del ALART, el estudio describe los elementos clave del marco legal considerando: cuestiones fundamentales de política, arreglos institucionales, arreglos de tenencia (propiedad), planificación y aprobación/autorización, producción – insumos, gestión de instalaciones, prevención y control de enfermedades, postproducción, e inspección y cumplimiento.
Conclusiones
De acuerdo con los autores del estudio, un robusto marco legal ambiental es un pre-requisito esencial para el desarrollo sostenible de la industria de la acuicultura.
Sin embargo, en el marco legal internacional existen pocas referencias específicas para la acuicultura. A diferencia de la pesca, no hay acuerdos regionales o globales sobre la acuicultura.
“A nivel internacional, el marco normativo o de elaboración de reglas que aborda directamente la acuicultura se compone en su totalidad de instrumentos de derecho indicativo, incluidos, en particular, el Código de Conducta y sus Directrices Técnicas. En particular, una serie de suplementos a las Directrices Técnicas abordan específicamente diferentes aspectos del sector. Varios organismos regionales también han adoptado lineamientos de derecho indicativo para la acuicultura, pero algunos de los instrumentos normativos más detallados no se derivan de organismos intergubernamentales sino del sector privado en el contexto de los esquemas de certificación y ecoetiquetado”, concluyen.
Asimismo destacan que el marco jurídico para la acuicultura en el ámbito nacional es complejo, debido a que comprende leyes o instrumentos jurídicos que abordan específicamente la acuacultura, así como una serie de leyes e instrumentos jurídicos que establecen el marco jurídico más amplio en el que tiene lugar la acuicultura.
Referencia (abierto)
FAO. 2023. Legal frameworks for sustainable aquaculture. FAO Legislative Study No. 117. Rome. https://doi. org/10.4060/cc6018en