Reino Unido.- Científicos de la University of York han publicado un informe en donde destaca la brecha existente entre la disminución del abastecimiento de pescado silvestre y las recomendaciones para el consumo de más alimentos de origen acuático. Mientras que los beneficios para la salud del consumo de pescado se han vuelto muy apreciados en los últimos años, muchas poblaciones de peces silvestres siguen siendo objeto de sobrepesca.
En un estudio publicado en la revista Marine Pollution Bulletin, la Dra. Ruth Thurstan, ahora investigador en la University of Queensland, y el Profesor Callum Roberts, profesor de conservación marina en la University of York, usaron los datos pesqueros históricos y las estimaciones de la población para mostrar como la disponibilidad de pescado por persona, a nivel nacional y mundial, han cambiado desde que se iniciaron los registros.
A través de la evaluación de 124 años de registros de capturas pesqueras, los científicos encontraron que las capturas doméstica en el Reino Unido han caído a su punto más bajo durante 70 años. Cuando ellos contabilizaron las pérdidas por procesamiento y el crecimiento de la población humana, la disponibilidad de pescado del abastecimiento doméstico mostró una disminución casi continua desde principios del siglo 20.
En la actualidad, el abastecimiento de pescado doméstico es por debajo de los niveles de consumo recomendados por la Food Standards Agency, proveyendo sólo una quinta parte de las dos porciones por semana recomendados. El déficit ha sido enmascarado en parte por el aumento de las importaciones y la acuicultura, que en conjunto elevan la cifra a una cuarta parte.
Los científicos dijeron que los patrones mundiales en la producción de pescado silvestre refleja estas tendencias preocupantes. En términos de disponibilidad de pescado por persona, el abastecimiento viene disminuyendo en los últimos 40 años, cayendo en casi un tercio. Sólo el rápido crecimiento en la acuicultura ha protegido a los consumidores de las consecuencias de la sobrepesca y el incremento de la población humana. La mitad de nuestros alimentos de origen acuático ahora proviene de las granjas. Sin embargo, Thurstan y Roberts dicen que la acuicultura no es una solución “ganar-ganar”.
Roberts indicó: “Muchas de las operaciones acuícolas infligen pesados costos ambientales sobre las poblaciones de peces silvestres y los ecosistemas costeros, tales como pérdida de hábitats, contaminación, enfermedades y pestes. Para ser viable en el largo plazo y ayudar a alimentar al mundo, tiene que haber una Revolución Azul en la acuicultura por métodos de producción sostenibles. La mejor gestión de las pesquerías silvestres podría también promover la producción al tiempo que se ayuda a superar el daño a la vida marina”.
Aunque la producción de pescado es cada vez más globalizado, las tendencias observadas en el Reino Unido, de la caída del abastecimiento doméstico y una mayor dependencia de las importaciones, son emblemáticos en muchos países desarrollados. Europa importa el 55% del pescado que consume, mientras que EEUU importó el 91% el año pasado.
Thurstan manifestó: “Nuestro trabajo muestra la graves desconexión entre las recomendaciones de alimentación saludables y la capacidad finita de las poblaciones de peces silvestres para satisfacer esas aspiraciones. Esta también demuestra como los consumidores del Reino Unido han sido protegidos de la caída de la producción doméstica por el incremento de las importaciones, pero esta demanda frecuentemente tiene un alto costo social y ambiental en las naciones productoras, muchos de ellos muy pobres”.
“Estos hallazgos son un llamado de atención para el gobierno del Reino Unido de que nuestras aspiraciones nacionales de salud deben ser consideradas en una escala global, y que necesitamos pensar cuidadosamente sobre las implicaciones de promover un mayor consumo de pescado en un mundo donde muchas personas ya tienen deficiencia en proteínas”.
Referencia:
Thurstan R. and C. Roberts. The past and future of fish consumption: Can supplies meet healthy eating recommendations?. Marine Pollution Bulletin. DOI: 10.1016/j.marpolbul.2014.09.016
http://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0025326X14006080