Sao Paulo, Brasil.- La Escola Técnica Estadual (Etec) Padre José Nunes Dias, de Monte Aprazível, en la región de São José do Rio Preto, cuenta con un proyecto innovador en el mercado brasileño. Los estudiantes y profesores vienen investigando la producción en cautiverio de pangasius (basa, panga), pez del sudeste de Asia (Vietnam y Tailandia), que podría tener impactos positivos en la piscicultura brasileña en los próximos años.
El Estado de Sao Paulo fue el primero en regular la crianza de pangasius en estanques en Brasil, en el año 2016. En razón a la facilidad de manejo, la reproducción en cautiverio y la gran cantidad de filete extraído, el cultivo puede proporcionar el aumento de la rentabilidad del sector. “Mientras que en un estanque de una hectárea se producen 20 toneladas de tilapia por año, es posible criar cinco veces más pangasius en el mismo espacio” explicó José Angelo Esteves, uno de los profesores responsables del proyecto.
Como una forma de comparar, la crianza de tilapia en cautiverio representa más de la mitad de la piscicultura brasileña: son cerca de 360 mil toneladas, de acuerdo con las estadísticas del 2017 de la Associação Brasileira de Piscicultura (Peixe BR). En el mismo período, Brasil importó 380 mil toneladas de filetes procesados de pescado para el consumo interno.
Nutrición
Los pangasius son cultivados en un tanque de mil metros cuadrados en ETEC. Además de la producción de alevinos, la investigación también incluye la nutrición y el engorde de los ejemplares. Los estudiantes del curso técnico de Agropecuaria integrada participan del proyecto desde la alimentación y la colecta, hasta el proceso reproductivo inducido en laboratorio.
A partir de noviembre, con el inicio del período reproductivo de pangasius, la unidad proveerá alevinos a los criadores de la región, con un precio menor a la del mercado. “Además de los objetivos didácticos, de formar alumnos actualizados sobre la realidad actual, pretendemos ayudar a mejorar la eficiencia de la acuicultura brasileña” dijo José ngelo Esteves.
Los primeros 60 reproductores, que permitieron el inicio del proyecto, fueron donado al ETEC de Monte Aprazível por la piscicultura Peixe Vivo, de la ciudad de Santa Fé do Sul. El ex-alumno de la escuela, el propietario de la empresa, Emerson Esteves, analiza la creación de un paquete tecnológico que permita la producción a gran escala de este tipo de pez.
“ETEC posee mucho conocimiento en la crianza de especies nativas y exóticas. Acredito que daremos un salto gigantesco en la producción de pescado. Además de los filetes, que hoy son importados, los piscicultores podrán luchar con la producción de ración a partir de la carcasa del pescado” afirmó el empresario.
Potencial
El territorio paulista ocupa la 3ra posición en el ranking nacional del área, por medio de diversos reservorios hidroeléctricos de gran potencial para la práctica de la piscicultura en jaulas. En el año 2017, el Estado produjo cerca de 70 mil toneladas de pescado, de acuerdo con la información de Peixe BR.
Para abastecer la demanda, Sao Paulo precisa importar pescado de otros Estados. Según los especialistas, el escenario puede ser modificado en el corto plazo, con la introducción de una especie exótica, inclusive en los asuntos relacionados al comercio exterior.
El presidente de la Associação Brasileira de Criadores de Pangasius, Gaetano Furno, proyecta que, en dos años, será posible aumentar la producción lo suficiente para atender el mercado interno, disminuyendo la dependencia en la importación. “Si Vietnam, un país de dimensiones mucho menores, es un gran exportador, imagine el potencial de Brasil” resaltó.
