Tromsø, Noruega.- Un estudio concluye que la incidencia de deformidades del esqueleto es baja cuando los juveniles de salmón son alimentados con dietas con altos niveles de proteína y ricas en fósforo, en combinación con bajas temperaturas de incubación de los huevos y crianza.
La inducción de la triploidia representa el método más común y seguro para la producción de peces estériles. Los esfuerzos para producir poblaciones funcionalmente estériles están relacionados con la mejora en el crecimiento somático, la supervivencia y la calidad de la carne. La esterilidad también es una herramienta de gestión para contener la genética de los peces en cultivo en los eventos de escapes accidentales.
Frecuentemente se reporta que los salmones del Atlántico (Salmo salar) triploides tienen una mayor incidencia de deformidades del esqueleto que los diploides, y existe evidencia de que las proporciones de los peces triploides con anormalidades del esqueleto pueden ser reducidas mediante cambios en las formulaciones de las dietas. En particular, los triploides tienen mayores requerimientos nutricionales para el fósforo y la proteína que los diploides, y también existen diferencias en los requerimientos de aminoácidos y el metabolismo.
Las proteínas hidrolizados de pescado tienen altas concentraciones de aminoácidos libres y bajos péptidos moleculares que pueden ser absorbidos fácilmente, y que subsecuentemente pueden influir en la utilización de los nutrientes y el crecimiento de los peces. Los hidrolizados de proteínas producidos de pescado y subproductos de pescado vienen siendo usados como ingredientes de piensos para varias especies de cultivo, incluido el salmón del Atlántico.
Investigadores de University of Tromsø -the Arctic University of Norway, Nofima AS, Skretting Aquaculture Research Center, SalmoBreed AS, Nord University, Universitat Politècnica de València (España) evaluaron los rendimientos de salmones diploides y triploides criados a bajas temperaturas y alimentados con una dieta basada en harina de pescado alta en proteína y rica en fósforo comparado con salmones alimentados con una dieta similar que contenía una alta proporción del hidrolizado de proteína de pescado.
“El salmón triploide tenía un número ligeramente, pero significativo, menor de vértebras que los diploides. Además, la prevalencia de deformidades del esqueleto fue más alto en los salmones triploides que en los diploides, independiente de la dieta” reportan los investigadores.
De acuerdo con el informe de investigación, en estudios previos las proporciones de salmones con anormalidades del esqueleto, o vértebras, fueron altos; excediendo el 20% para diploides y superando el 40% en triploides. “En el presente estudio, los porcentajes de peces con anormalidades de las vértebras fueron mucho menores. En parte, estas diferencias probablemente estén relacionadas a las temperaturas usadas durante la incubación de huevos, al inicio de la alimentación y el crecimiento inicial en agua dulce; menores estudios fueron usados en el presente estudio que en otros” destacan los investigadores. {mprestriction ids=»*»}
Ellos también destacan que la dieta con hidrolizado de pescado tuvo una significativa reducción en el número de salmones triploides con anormalidades vertebrales, en comparación con los salmones triploides alimentados con la dieta de harina de pescado, posiblemente debido a las diferencias en la biodisponibilidad de fósforo entre las dos dietas.
“Los resultados del presente estudio indican que la incidencia de las deformidades del esqueleto es baja cuando los juveniles del salmón son alimentados con dietas altas en proteínas y ricas en fósforos, en combinación con bajas temperaturas de incubación de los huevos y crianza” concluyen.
Ellos indican que aunque el uso de dietas ricas en fósforo pueden ser beneficiosos para la producción y bienestar del salmón triploide durante la fase de crianza en agua dulce, también existe el potencial de consecuencias negativas del uso de esas dietas. El uso de dietas ricas en fósforo incrementará la excreción fecal y no fecal de fósforo, generando un incremento de las concentraciones de fósforo en los efluentes de las unidades de crianza de peces.
Referencia (abierto):
Peruzzi S, Puvanendran V, Riesen G, Seim RR, Hagen Ø, Martínez-Llorens S, et al. (2018) Growth and development of skeletal anomalies in diploid and triploid Atlantic salmon (Salmo salar) fed phosphorus-rich diets with fish meal and hydrolyzed fish protein. PLoS ONE 13(3): e0194340. https://doi.org/10.1371/journal.pone.0194340
http://journals.plos.org/plosone/article?id=10.1371/journal.pone.0194340 {/mprestriction}
