Chile – Con el objetivo de establecer lazos comerciales y concretar la transferencia de la tecnología de cultivo, la consultora New Genesis se incorporó al Programa Corvina en el rol de co-ejecutor. Previamente, New Genesis asesoró el proceso de empaquetamiento tecnológico de la iniciativa liderada por Fundación Chile y financiada por Corfo, que busca diversificar la acuicultura nacional a través de la incorporación de la especie nativa Cilus gilberti.
Concluido el proceso de validación de la tecnología para el cultivo de la especie nativa Cilus gilberti, se inició la etapa para transferir el paquete tecnológico y escalarlo a nivel industrial, fase en que la consultora New Genesis ejerce el rol estratégico de co-ejecutor del Programa Corvina, iniciativa liderada por Fundación Chile, con el apoyo de Corfo.
«Queremos ser un partner, por eso asumimos como co-ejecutor, para entregar nuestra experiencia en desarrollar nuevos negocios a partir de este programa tecnológico, acompañando al equipo de Fundación Chile en el desafío de salir al mercado y encontrar inversionistas para escalar el cultivo de corvina», señala Moureen Valdés, gerente general de New Genesis.
Según la ejecutiva, «después de estudiar todos los antecedentes y participar activamente en el empaquetamiento de la tecnología de cultivo, estamos convencidos de que hay un mercado potencial, dado que es un producto que se valora, sobre todo fuera de Chile, por lo que tendría un promisorio espacio en el mercado internacional, principalmente asiático. Por lo tanto, la oportunidad de negocios está; el desafío es poder cubrir esa demanda por la corvina de una manera que la oferta sea estable en el tiempo y no por temporadas, junto con alcanzar el mejor rendimiento de los cultivos».
Aporte para la fase de transferencia
Fundada el año 2006, New Genesis divide sus servicios de consultoría en tres áreas: «Estrategia y Gestión de Negocios», «Excelencia Operacional» e «Innovación y Transferencia Tecnológica», que es el ámbito que llevó a la empresa a asesorar al Programa Corvina.
Siendo una consultora multisectorial, poseen experiencia previa en la industria acuícola y en programas tecnológicos. «Hace unos cinco años estuvimos inmersos en cómo disminuir la carga antibiótica en los salmones y buscar desarrollos tecnológicos para lograrlo, pero también en ver cómo este cultivo se podía posicionar de una mejor manera en Chile. Nuestro país es pionero en la industria acuícola, particularmente en salmones, y eso ha abierto la puerta a otros cultivos, como la corvina», sostiene Moureen Valdés.
Respecto a la posibilidad de que en torno a esta especie se genere una nueva industria para la zona norte, la ejecutiva releva el rol de Corfo en esa visión: «Los programas que se desarrollan en la zona norte tienden a enfocarse en minería, y creo que ha sido bueno de parte de Corfo diversificar los sectores en que asigna estos fondos para promover otro tipo de industrias, como es el caso de la acuicultura».
Después de un trabajo de más de una década, el Programa Corvina logró el hito de completar el paquete tecnológico, pasando a la actual fase de transferencia de la tecnología de cultivo. «Creemos que la experticia que posee el equipo de New Genesis aportará, sin duda, a la identificación de nuevos actores de relevancia en el quehacer de la acuicultura nacional e internacional, permitiendo de esta manera invertir con confianza en el comienzo de esta nueva industria», enfatiza Jorge Lizardi, director del Programa Corvina.
Sobre el Programa Corvina
El Programa Corvina se inició el 2010, en el marco de las iniciativas para la diversificación de la acuicultura nacional, actividad concentrada en salmónidos y mejillones (choritos).
La corvina (Cilus gilberti) es una especie nativa, que extiende su presencia desde el norte de Perú hasta la zona de la isla de Chiloé por el sur. Es altamente demandada por sus atributos nutricionales y gastronómicos.
Finalizada la etapa de validación de una tecnología de cultivo, el Programa Corvina se proyecta como una oportunidad de generar una nueva industria en las regiones del norte del país (principalmente en sus zonas productivas de Coquimbo y Tarapacá), con capital humano especializado y una plataforma de proveedores regionales, compuesta fundamentalmente por pymes.
Cabe destacar la participación en el Programa Corvina de ADL Diagnostic Chile; del Instituto del Mar Carlos Condell, y las empresas asociadas, Pesquera Friosur, Vitapro Chile, Luxmeter, Metal Electro y Taller de redes Avellanal, entre otros; así como el rol que cumplió la Universidad Arturo Prat en el desarrollo del subprograma de cultivo en balsas jaula.