Bremerhaven, Alemania.- Trasladar las operaciones de la acuicultura lejos de la costa además de su combinación con otras actividades, comúnmente denominada acuicultura multi-uso, aún está en la infancia. Científicos describen las experiencias en Alemania, Bélgica, Países Bajos, Noruega, Corea del Sur y EEUU.
El desarrollo de la acuicultura sostenible tiene como objetivo el asegurar que la acuicultura comercial tenga efectos adversos mínimos al ambiente. Una forma de alcanzar este objetivo es a través del desarrollo de métodos mejorados de la gestión de los efluentes para la acuicultura en tierra, costera y en mar abierto mediante la combinación de la acuicultura extractiva (macroalgas, bivalvos) y la de alimentación (salmones), también referidos como sistemas de acuicultura integrada multitrófica (IMTA).
Especies extractivas
Las especies extractivas marinas incluyen una gran variedad de especies, que pueden ser subdivididas entre grupos principales de animales y algas: (1) filtradores, como ostras y mejillones, (2) alimentadores de depósitos, como poliquetos, erizos de mar y pepinos de mar, (3) absorbedores de nutrientes, como microalgas y macroalgas.
Las especies extractivas actúan como filtros vivos y pueden ser criados sin alimentos suplementarios debido a que toman los nutrientes de la columna de agua que los rodea.
IMTA en aplicaciones en mar abierto
La producción de especies extractivas en áreas en mar abierto podría solucionar el problema mundial de proveer grandes cantidades de biomasa al usuario final. Existen varios informes disponibles que examinan la factibilidad de trasladar la acuicultura de macroalgas y bivalvos hacia ambientes más hostiles en mar abierto, en combinación o no con las estructuras en mar abierto.
Conclusiones
Existe una creciente preocupación sobre las consecuencias negativas de la acuicultura intensiva de peces y la necesidad para remediar sus consecuencias. Las dos estrategias para satisfacer los requerimientos de más espacio para la acuicultura son: (1) acuicultura en mar abierto, que en la actualidad parece ser muy caro y de alta demanda técnica, pero debido al amplio espacio disponible, permite una considerable producción en masa, y (2) el muy prometedor pero algo complejo enfoque IMTA.
Los sistemas multi-especies y multi-uso no solo incrementan las ganancias por unidad operación/cultivo, sino también la sustentabilidad social y la aceptación social de las operaciones acuícolas.