Costa Rica.- Un país que ha logrado avances significativos en el ámbito de la investigación en peces marinos, es Costa Rica, concretamente la Estación de Biología Marina “Juan Bertoglia Richards”, administrada por la Escuela de Ciencias Biológicas de la Universidad Nacional.
Una especie objeto de estudio en este caso es la corvina reina (Cynoscion albus), apreciada en el Golfo de Nicoya por su carne blanca, su tamaño y alto interés comercial.
En el año 2010, el Laboratorio de Cultivo y Reproducción de Peces Marinos de la Estación consiguió la reproducción en cautividad, el desarrollo larvario y “cerrar el ciclo” de la corvina aguada.
Ahora, en concreto el 20 de junio de este año, los investigadores han obtenido las primeras puestas fecundadas de corvina reina y están desarrollando el cultivo larvario con normalidad.
Este avance científico ha sido posible gracias al trabajo de los biólogos Marvin Ramírez y Jorge Boza Albarca.
Después de mantener en cautiverio por más de tres años un grupo de juveniles hasta alcanzar la talla de madurez sexual y formar parte de un stok de reproductores de la primera generación obtenida en cautiverio, se obtuvo un desove espontáneo de corvina reina. Los peces fueron criados hasta completar el periodo de reproducción. Tras tres años de espera, tanto las hembras como los machos liberaron sus productos sexuales al agua, lográndose ahí la fertilización y obteniéndose por primera vez en cautiverio huevos fecundados de corvina reina, la corvina más importante a nivel comercial en el golfo de Nicoya”.
El golfo de Nicoya es un estuario tectónico que se extiende aproximadamente 80 kilómetros hacia el sur desde la boca del río de Tempisque hasta el Océano Pacífico. En la boca del río de Tempisque, el golfo tiene menos de 3 kilómetros de ancho en las cercanías de la I. Toro y se ensancha a aproximadamente 50 kilómetros en su extensión situada más al sur, entre Cabo Blanco y Punta Mala. La forma, batimetría e hidrografía del golfo lo dividen en dos regiones distintas: el golfo superior bajo, situado al norte de una línea imaginaria entre la isla de San Lucas y Puntarenas, la cual tiene menos de 20 m de profundidad y bordeada en su mayoría por bosques de mangle. La segunda región es el golfo inferior alto, con profundidades que se van incrementando hasta los 200 m en la boca y está bordeada por acantilados rocosos (Voorhis et al. 1983).
La Corvina reina puede llegar a alcanzar una talla de 120 cm, y su talla de primera madurez a los 55cm. Debido a la presión de la pesca a disminuido notablemente.