Los investigadores de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Católica de la Santísima Concepción (UCSC), Dra. Catterina Sobenes y Christian Díaz, lograron un hito significativo en la industria o en el área de la acuicultura con la concesión de la patente para su “Sistema de cultivo con bandeja para moluscos bivalvos” (número 2021-03516) en Chile. Este avance tecnológico promete transformar la manera en que se cultivan moluscos bivalvos y gasterópodos, ofreciendo una solución eficiente para las zonas expuestas a condiciones marinas adversas.
El sistema patentado se caracteriza por su diseño innovador, que incluye pares de medios de flotación alargados y conectados a un medio de cultivo con bandejas. Esta configuración es clave para minimizar el movimiento horizontal causado por el oleaje y las corrientes marinas, lo que resulta en un ambiente más estable para el crecimiento de los moluscos.
Beneficios de la tecnología
Uno de los principales beneficios de esta tecnología es la reducción significativa del estrés en los organismos sésiles, lo que se traduce en una mayor tasa de crecimiento y productividad. De hecho, los estudios realizados por los académicos de la UCSC han demostrado que las especies cultivadas en el sistema con bandeja pueden alcanzar un crecimiento hasta un 25% superior en comparación con los métodos tradicionales.
Además, el sistema permite hacer un uso más eficiente de la columna de agua, maximizando la productividad por unidad de área. Esto no solo beneficia a los productores acuícolas en términos de rendimiento, sino que también contribuye a una industria más sostenible al evitar la sobreexplotación de los recursos marinos.
La riqueza de nutrientes y la menor cantidad de contaminantes presentes en las zonas expuestas son otros factores que favorecen el uso de este sistema. Los moluscos bivalvos y gasterópodos cultivados en estas condiciones tienden a alcanzar mayores tamaños, lo que puede tener un impacto positivo en el mercado y en la economía de las comunidades costeras.
Mix de productos
Christian Díaz indicó que la idea es generar nuevas patentes con el fin de incorporar no solamente Bivalnet, sino que ver otro tipo de recursos para ofrecer a los productores de moluscos un mix de productos o servicios que se han generado desde la innovación tecnológica.
Agregó que cuando formulan un proyecto o una idea, siempre lo hacen en base de que obtendrán la patente y haber logrado una con “Sistema de cultivo con bandeja para moluscos bivalvos”, “nos llena de felicidad y queremos extenderla a Europa”, adelantó.
Mientras que, desde la Oficina de Transferencia Tecnológica de la Dirección de Innovación de la Universidad de la Santísima Concepción, Jorge Mancilla, gestor I+D+i del Proyecto Ingeniería 2030 de la Casa de Estudios, afirmó que la obtención de patentes, por parte de académicos de la Universidad, es de mucha importancia como resultado de su trabajo en áreas de la investigación, desarrollo e innovación.
“Esto da pie para la transferencia de valor hacia el entorno externo de la Universidad, teniendo como objetivo contribuir con beneficios en aspectos económicos, sociales y ambientales para que empresas e industrias puedan ser más competitivas en el mercado. Por otro lado, este tipo de resultados confirma el compromiso que el proyecto Ingeniería 2030 tiene en áreas de la I+D+i+ebct, el cual busca ser un aporte al desarrollo regional y nacional”, cerró.
